Agente Libre Digital
·4 dicembre 2024
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A expensas del debut en la competición del FC Barcelona y con la reciente eliminación del RCD Espanyol, la ciudad condal se preparaba para vivir otra vibrante eliminatoria de la Copa del Rey.
En el barrio de Sant Andreu de Palomar se respira olor de fútbol y mucha ambición, hecho plasmado en la gran cantidad de aficionados del Sant Andreu que volvieron a abarrotar una vez más el Narcís Sala, con un equipo local que buscó la machada ante un primera como el Real Betis Balompié, que no acudía en un buen estado de forma.
Cedric Bakambu disputando un balón. Fuente: Twitter Real Betis Balompié
El inicio del encuentro nos dejó un Real Betis consciente de lo que se jugaba tratando de agobiar a los catalanes y buscando portería rival con asiduidad en los primeros cinco minutos. El partido entonces derivó en unos minutos de tira y afloja, en los que ambos conjuntos se tantearon, con el equipo de la capital catalana dominando el esférico, aunque sin ocasiones.
Pero cuando parecía que estaba algo mejor plantado en el terreno de juego, una protestada mano en la frontal del área local, le otorgó la oportunidad al Chimy Ávila de, con una falta lanzada con potencia, poner por delante a los béticos.
Lejos de venirse abajo, los quatribarrats llevaron en volandas a sus jugadores y apenas diez minutos después de encajar, Sergi Serrano frotó su varita para asociarse con Marc Jurado y con un disparo cruzado batir a Vieites.
Los jugadores de la UE Sant Andreu celebrando el empate. Fuente; Twitter UE Sant Andreu
En los siguientes compases los visitantes lograron recuperar terreno en la estadística de posesión pero nuevamente, los errores de lectura en zonas decisivas del campo, unidos a la solidez defensiva defensiva rival, sirvieron para impedir el cambio en el electrónico con el que se llegaría al intermedio.
Tras el paso por vestuarios los jugadores de casa salieron espoleados y comenzaron a asediar la portería andaluza con varias ocasiones seguidas, entre ellas un mano a mano sacado por Vieites y una extraña jugada en la que primero el propio portero, y posteriormente el capitán local Albertito tras disparo de un participativo Sergi Serrano, sacaron bajo palos para negarle el gol a los locales.
Durante el resto de la segunda parte el Betis se mostró expectante ante el juego del Sant Andreu, sin generar apenas peligro a la portería de Nil Torreguitart.
Aún así quiso la fortuna que el árbitro concediese en el tramo final un penalti favorable al cuadro sevillano. De tratar de convertirlo se encargó y erró Vitor Roque, pero Marc Bartra, que partía desde dentro del área en el momento del disparo, metió el gol que puso por delante al cuadro bético, que cerró el pase a dieciseisavos de final, donde competirán los equipos clasificados para la Supercopa de España.