¡Récord y asistencia! Lamine Yamal se 'salió' con España y es el más joven en jugar en la Eurocopa | OneFootball

El nombre de Lamine Yamal comienza a ser 'fijo' en todos los debates. Está irrumpiendo con mucha fuerza en los que están siendo sus primeros compases en la élite. Con el FC Barcelona rompió todos los registros posibles y acabó siendo el jugador más diferencial en ataque, con diferencias, y en España está con intenciones de repetir la historia y ser importante bajo las órdenes de Luis de la Fuente.

El seleccionador nacional no ha dudado en él, pero tampoco le faltan argumentos para confiar en él como uno de sus 'fijos' para la línea del ataque. Estuvo en la alineación inicial de España en su debut en la Eurocopa, contra Croacia en el estadio Olímpico de Berlín, donde también se jugará la final el 14 de julio, para convertirse en el futbolista más joven en participar en la competición. Lo hizo, además, con una asistencia en el tercer gol de 'La Roja'.

El futbolista formado en La Masia debutó en la Eurocopa con 16 años, 11 meses y dos días. Ha superado a Kazper Kozlowski (Polonia) quien se había estrenado en la última Eurocopa (2021), contra España en La Cartuja con 17 años y 246 días. Poco antes, había debutado Jude Bellingham con Inglaterra con 17 años y 349 días.

Jugadores más jóvenes en debutar en la Eurocopa

Lamine ha pulverizado los récords y sigue su línea ascendente para convertirse en uno de los futbolistas más diferenciales del viejo continente. Contra Croacia, apareció por el extremo derecho y se convirtió en una pesadilla para Gvardiol, junto a Dani Carvajal. Se mostró muy activo, participativo e incisivo en un partido en el que la superioridad de 'La Roja' fue más que evidente y en la que el joven futbolista culé participó con una asistencia.

Al borde del descanso y con Croacia muy 'tocada' por las pocas opciones que le estaban dejando los españoles para progresar y crear, apareció Yamal para mandar un centro medido con la zurda al corazón deel área, donde apareció como un '9' Carvajal para poner el pie y clavar el balón en lo más profundo de la red. Fue la mejor carta de presentación posible para el futbolista del Barça.