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·2 dicembre 2024
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Se acerca el 1 de enero, la fecha de caducidad de la ficha que firmó Dani Olmo en el mes de septiembre para poder jugar con el Barça.
La situación es delicada porque en este momento el Barça no puede volver a inscribirle, lo que confirma el recelo que mostró Nico Williams para firmar por el Barça este verano.
Dani Olmo reaparecerá mañana. ¿Podrá seguir jugando en enero? | Getty Images
Iba en serio. Al margen de la situación económica, que no es obstáculo, está el problema legal con el fair play financiero, que tiene atado al club de pies y manos.
Ya no se puede estirar más el brazo que la manga. Las cuentas deben estar en orden, y las del Barça no lo están.
Dani Olmo tampoco podía ser inscrito este verano. Y si ha jugado hasta ahora es porque el club aprovechó la "providencial" baja de larga duración de Andreas Christensen.
El Barça está condenado a pasar penurias hasta que el Camp Nou esté terminado del todo. Solo entonces podrá cubrir el total de su aforo para 104.000 espectadores. Y disponer del ingreso de los 85.000 abonados.
Hasta entonces, tendrá que ir parcheando la situación. Y ahora confía en un contrato nuevo con Nike que no acaba de llegar nunca para enderezar la situación.
Pero ni aún así es suficiente. A Dani Olmo se lo han explicado y está más que preocupado. En su misma situación está Pau Víctor.
Si antes del 31 de diciembre no llega una solución que nadie espera, pasarán a la recámara como futbolistas sin ficha.
Desde el final del verano hasta ahora Laporta ha tenido tiempo suficiente para encontrar una solución imaginativa. O un traspaso. Pero no han llegado ni las soluciones ni los traspasos, y el 1 de enero se acerca de forma inexorable.
La venta de Barça Studios, y el pufo de 75 millones que ha dejado un farol con forma de palanca, no ha ayudado. Y la Liga ahora se muestra inflexible exigiendo el cumplimiento de la normativa vigente para todos.
Laporta ya no sabe qué decirle a Olmo para tranquilizarle | Getty Images, PixaBay, Madrid-Barcelona
El Barça necesita acogerse a la regla 1:1 para poder inscribir a Olmo. Y a día de hoy no se dan las circunstancias. El nuevo contrato con Nike será muy rentable en el futuro, pero hoy no resuelve nada.
Desde el puesto de mando del club se envía el mensaje de que el club busca nuevos patrocinadores. Pero cuesta creer que lo que no se ha conseguido en agosto, septiembre, octubre y noviembre vaya a lograrse ahora. Por muchos viajes que el presidente haga a Azerbaiyan o Mongolia.
Ahora Laporta busca a la desesperada sacarle rendimiento al pantalón del equipo a la espera de un ingreso millonario que ayude. Y anuncia que este verano habrá gira por Asia, que deja más dinero que Estados Unidos.
Pero no es suficiente. Con los abonados al completo y el Camp Nou repleto nada de esto estaría sucediendo, pero el momento es el que es. Y Olmo no puede esperar a que el Camp Nou esté acabado en 2027.
El problema podría solucionarse con un traspaso millonario, pero la capacidad de convicción del club hasta ahora ha sido nula. Nadie quiere irse del Barça.
No queda más salida que el aval personal de los directivos haciendo así frente a sus errores de gestión... o ceder a Olmo a otro equipo en el que sí pueda jugar.