El búfalo está de moda | OneFootball

Foto:  Diario de Sevilla

Pablo Durán está siendo uno de los personajes de moda en el celtismo. El de Tomiño ha sido elegido por segundo mes consecutivo MVP del Celta, y la salida de Douvikas ha cambiado su status en la plantilla, convirtiéndose en el segundo delantero, aunque a la vista de las últimas alineaciones quizás sea el primero.

Veremos en las próximas jornadas cuáles son las decisiones de Claudio Giráldez, pero su rendimiento le avala. Lleva 4 goles anotados en Liga, uno menos que Borja Iglesias, y uno más que Douvikas, y todo eso sin jugar apenas como delantero centro, ya que en la mayoría de sus partidos ha actuado como mediapunta, por la derecha o por la izquierda.

El canterano suma cuatro titularidades consecutivas, lo que lo convierte ahora mismo en uno de los jugadores más imprescindibles para Claudio Giráldez. Una situación con la que seguramente ni soñaba cuando acabó la pasada temporada, con un excelente rendimiento en el Fortuna, pero todo apuntaba a que no seguiría en el club celeste. Se ganó un lugar en la pretemporada, y lo defiende con uñas y dientes en cada partido.

Durán es uno de esos jugadores por los que uno se alegra en lo personal de sus éxitos. Pocos jugadores han llegado a Primera División con todo en contra como él, que hace tan solo cuatro años jugaba en Primera autonómica. La progresión espectacular, el trabajo incansable y el necesario talento le han conducido a la máxima categoría, y le han convertido en el jugador de moda en el Celta.