OPINIÓN: El «Cholismo» en horas bajas | OneFootball

Hay momentos que marcan cambios de dinámica, en la vida, en el trabajo, en los estudios. Para el Atlético de Madrid, ese punto de cambio fue la llegada de Diego Pablo Simeone el 23 de diciembre de 2011

Para entender lo que han supuesto los 14 años posteriores a su llegada, hay que conocer de donde se venía. Después del doblete en la temporada 95/96, el club desciende 4 años después como consecuencia de una administración muy cuestionable por parte de la directiva encabezada por Jesús Gil y Enrique Cerezo. Tras dos años en el infierno, vuelve a la máxima categoría de la mano de Luis Aragonés y de Fernando Torres.

Su regreso a la élite no iba a ser fácil, hasta la llegada de Quique Sánchez Flores en 2009, las temporadas en liga iban a ser decepcionantes. Con Sánchez Flores se lograron dos títulos europeos, aun así se decidió prescindir de él para traer a Gregorio Manzano, quien dejaría al club en undécima posición y eliminado en copa por el Albacete, que en ese momento militaba en segunda B.

Fuente: RTVE.es

En esta instancia llega Simeone al banquillo, y el restó es historia. Se ha generado una comunión entre aficionados y entrenador que pocas veces se ha visto en algún club. Es tal dicha comunión, que muchos aficionados lo defienden a capa y espada porque tiene un historial detrás que lo respalda, y que le ha llevado a ser el líder incondicional de toda una institución como el Atlético de Madrid.

PERDIDO EN SUS IDEAS

El último título que se levantó con Simeone fue la Liga de la 20/21, en la que el «Cholo» supo dar un lavado de cara al equipo, adaptarse a una plantilla renovada y salir campeón. Han pasado tres temporadas desde este momento, y el equipo durante todo este tiempo ha estado lejos de ganar ningún otro título.

Durante todo este proceso, Simeone ha tratado de dar continuidad a esa idea que implantó en la 20/21, pero al igual que ese año se tuvo que reconvertir para poder competir, ahora mismo se encuentra en una situación similar. Tras un mercado muy potente, Simeone no está encontrando la manera de acoplar a todos estos fichajes en un sistema que les saque el máximo potencial.

Fuente: RTVE.es

Vuelve a estar estancado en una idea sin más recorrido, no tiene las piezas para llevarla a cabo, y el rendimiento está dejando mucho que desear. El «Cholo» se encuentra en un limbo entre garantizar un buen desempeño defensivo, inexistente los últimos años, y seguir manteniendo una buena efectividad de cara a puerta, y es en esta indecisión en la que está totalmente perdido.

Pese a haber sido un gran mercado de verano, es cierto que sigue habiendo algunas carencias en la plantilla con difícil solución, pero esta situación tampoco justifica el pésimo desempeño del equipo en fase ofensiva. La salida de balón es inexistente, y cuando se consigue llegar a 3/4 de campo, las ideas se nublan y no existe la manera de romper la defensa contraria.

Desde el club se le va a seguir dando continuidad a Simeone como es lógico, pero desde la afición se debería empezar a mirar más al banquillo, porque es cierto que en el palco y en el vestuario hay muchos problemas, pero eso no exime al cuerpo técnico de una responsabilidad que ya viene de largo.