Diario La Escuadra
·13. März 2025
El Benfica y su increíble maldición en Europa

In partnership with
Yahoo sportsDiario La Escuadra
·13. März 2025
Nadie duda de que el Benfica es uno de los grandes de Portugal. El equipo de Lisboa siempre está presente en competiciones europeas y en muchas ocasiones da un muy buen rendimiento, llegando a ganar dos Champions League consecutivas en 1961 y 1962. Sin embargo, de un tiempo a esta parte, el equipo luso no ha sido capaz de llevarse ningún título europeo a sus vitrinas con el primer equipo y, con la derrota por 4-1 en el total de los octavos de final de esta copa de Europa contra el FC Barcelona han perdido de nuevo la oportunidad de romper esta racha.
Algunos pueden achacar las derrotas europeas del Benfica de todos estos años a la mala suerte, la mala gestión por parte de presidentes, las deudas o la llegada de los fichajes multimillonarios de super estrellas a los que ellos no podían aspirar. Pese a esto son ya muchos los que conocen el mito, que cada vez parece acercarse más a ser una realidad, de la conocida como la maldición de Béla Guttmann.
Fuente: Diario de Sevilla
Béla Guttmann fue un exfutbolista y entrenador nacido en la ya inexistente Austria-Hungría en el 1899. De su periodo como jugador no hay demasiado registro debido a que debutó en 1919, una época en que no quedaba prácticamente registro de lo vivido en los terrenos de juego, además de jugar en una Europa devastada y que sufría los efectos de la primera guerra mundial. De lo que si hay registro es de su carrera como entrenador, la cual inició en 1933 en el ya desaparecido Hakoah Viena. Tras entrenar varios equipos Austríacos y Húngaros se vio obligado a poner en pausa su carrera debido a la persecución que sufrió el pueblo judío, por la que llegó a ser enviado al campo de concentración de Auschwitz, campo en el que fallecieron su padre y su hermana pero al que él logró sobrevivir.
Al acabar la guerra Guttmann siguió ejerciendo como entrenador, hasta llegar en 1953 al AC Milán, equipo en que, pese a sus buenos resultados, fue despedido en el ecuador de su segunda temporada debido a problemas con la directiva. Finalmente, tras un breve paso por Brasil entrenando al São Paulo FC, llegó a Portugal, donde, tras un año entrenando al FC Porto, fichó al fin por el Benfica.
En el club lisboeta Guttmann promovió un ascenso de canteranos y jugadores jóvenes y una limpieza total de jugadores del primer equipo el cual les llevó a conquistar una liga en 1960. En 1961 volverían a ganar la liga y conquistarían su primera Champions League, además de fichar a Eusébio, el jugador con más goles de la historia del club. Al año siguiente repitieron la gesta y se llevaron su segunda Copa de Europa consecutiva tras vencer al Real Madrid en la final.
Béla estaba en el zénit de su carrera como entrenador, tenía al equipo más fuerte del continente en ese momento y se estaba afianzando como uno de los mejores entrenadores del siglo. Este aumento de caché le llevó a solicitar un aumento salarial que fue muy mal visto por la directiva del Benfica, que le acabó despidiendo el mismo año en que fueron campeones de Europa. El día de su despido Béla Guttmann pronunció la célebre y terrible frase: «En cien años desde hoy, el Benfica, sin mí, no ganará una copa europea.»
Lo que parecía una amenaza al aire por la rabia de su despido resultó ser una auténtica maldición que lleva persiguiendo al Benfica desde hace más de seis décadas.
Béla Guttmann. Fuente: El Confidencial
Desde aquel año 1962 el Benfica ha llegado a un total de 7 finales europeas, de las cuales no ha ganado ninguna.
La primera final perdida fue la de la temporada 1962-63, la misma en que fue despedido Guttmann. En esta final cayeron 2-1 frente al AC Milán en Wembley.Dos años más tarde cayeron ante el Inter de Milán en el Stadio Giuseppe Meazza por 1-0.
En 1968 cayeron de nuevo en Wembley ante el Manchester United por 4-1.
No fue hasta pasados quince años, con Guttmann ya fallecido, que el Benfica llegó a otra final europea, esta vez de la Europa League del año 1983, donde perdieron por 2-1 en una final a doble partido contra el Anderlecht belga. En 1988 volvieron a una final de Champions League y volvieron a perderla, esta vez en Stuttgart contra el PSV Eindhoven en penales. Dos años más tarde cayeron de nuevo en Champions League contra el AC Milán esta vez por 1-0 en Viena, lugar de sepultura de Béla Guttmann.
Ya en este siglo el Benfica perdió dos finales de Europa League seguidas: En 2012 en Amsterdam contra el Chelsea por 1-2 y en 2013 contra el Sevilla en penales.
Desde 2013 el Benfica no ha vuelto a disputar una final europea y, con la derrota ante el FC Barcelona, este año tampoco lo hará, la cual cosa suma un año más en que se cumple con esta maldición. Esto nos deja una pregunta muy evidente: ¿Veremos al club luso levantar una copa europea antes del 2062?