Racing de Alma
·04 de fevereiro de 2025
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Estudiantes, la primera prueba difícil que tuvo Racing en el todavía incipiente campeonato le puso un freno en seco. En el resultado y en el juego. Después de dos triunfos contundentes ante Barracas Central y Belgrano, el equipo de Gustavo Costas no pudo con el Pincha. Ni el marcador ni en lo futbolístico. Esta vez no hubo poder ofensivo, ni solidez defensiva ni la famosa intensidad para combatir. Racing perdió con Estudiantes porque fue superado claramente. Jugó mal, sufrió, no estuvo en partido y se fue de La Plata con los bolsillos vacíos. Ni siquiera mostró intensidad, aptitud en la que Estudiantes arrasó a Racing.
La Academia padeció la tarde-noche. El León le torció la muñeca en varios aspectos desde el comienzo. Lo sorprendió desde lo estratégico, táctico, lo colectivo y lo individual. Los gritos desesperados de Gabriel Arias para Costas, a quien le pedía que acomodara las piezas porque el equipo perdía sistemáticamente en la mitad de la cancha, fueron todo un síntoma.
Racing sintió mucho las ausencia de Juan Nardoni y Agustín García Basso (este fue baja por segundo encuentro al hilo) ante un rival de los difíciles como es Estudiantes. En el fondo el pibe Santiago Quirós cometió un error grosero cuando quiso salir jugando, le robaron la pelota y de ahí llegó el gol de Ascacibar. Pero sería injusto caerle solo a él: la Academia no tuvo respuestas anímicas ni futbolísticas. El Pincha se impuso en la zona media, con Almendra más lento de lo normal, lejos de todas las acciones y sin influencia en la generación.
Martirena no tuvo un buen partido como todo Racing.
Ni siquiera los cambios despertaron a Racing contra Estudiantes. Almendra, de flojísimo partido, le dejó su lugar a Zaracho. A su vez, Salas y Sosa, también tocados, les dejaron sus lugares a Balboa y Colombo. Pero más allá de los nombres, Costas tampoco estuvo lúcido para cambiar el dibujo. Jamás rompió la línea de cinco para subir a un volante más. Fue tan pobre lo de los jugadores como lo del técnico. Tuvieron todos una mala tarde. Rojas, una garantía, le pifió en otra salida, le dejó la pelota a Neves y puso el 2-0. Racing nunca estuvo cerca siquiera del descuento. Hay que mejorar con Boca.
Foto de portada: Prensa Racing