Revista MadridistaReal
·08 de novembro de 2024
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Intuyo al madridismo muy tocado, casi resignado o al borde de un ataque de histeria. No digo que no sea justificable, entiendo la decepción y la rabia de los últimos resultados, pero quizás haya ciertas luces que estemos obviando.
La primera razón para el optimismo es que este equipo hace menos de seis meses estaba levantando la decimoquinta. Es cierto, han existido cambios, pero eso nos lleva a la siguiente gran baza para creer en que esta situación es reversible.
El Real Madrid de Jude y Vini, anunció en junio la tan ansiada incorporación de Kylian Mbappé. El conjunto blanco y el francés unían sus caminos tras años de espera. Uno de los mejores futbolistas del mundo se unía a la tremenda plantilla madridista. Un sueño hecho realidad.
Es verdad, el 9 no está atravesando su mejor momento, pero me resisto a pensar que de sus botas no van a salir tremendas alegrías para el madridismo. El Real Madrid no es un club sencillo, no hay nada comparable y las expectativas con el de Bondi son enormes. No tengo dudas, las acabará cumpliendo. Y esto no es jugar a ser adivino, basta con observar su frustración, sus ganas de querer triunfar y la presión de un chico que quiere devolver al madridismo todo lo que no ha podido darle durante estos años. Eso pesa y pesa mucho.
La frustración viene precisamente de ese anhelo de celebrar goles increíbles, como los que ya ha estado apunto de marcar. Llegarán más pronto que tarde.
Recuerdo que cuando llegó Cristiano, el antimadridismo hablaba de que «no marcaba en los partidos importantes», el resto es historia. Demos tiempo al francés, que está haciendo todo lo posible para dedicarse en cuerpo y alma al club blanco, incluso dejando de acudir a los encuentros con su selección.
Además de Kylian, el Real Madrid tiene una plantilla envidiable. Vinicius, Jude Bellingham, Valverde, Camavinga, Rodrygo, Brahim, Rüdiguer, Militao, Courtois… Una larga lista de muchos de los mejores jugadores del mundo. Es evidente, algo sucede como equipo, pero muchos de ellos ya saben lo que es ganar con el Real Madrid y también perder. Ya han vivido una temporada convulsa y después de ello vino la decimoquinta. Muchos incluso ya formaron parte del milagro de la decimocuarta tras una de las épocas más oscuras del club y tras la marcha de varias de sus leyendas. Todo es un proceso, pero estos jugadores no son unos tuercebotas que hayan llegado ahí por suerte. Lo llevan demostrando durante años.
Además este equipo ya es campeón. A pesar de las salidas y las llegadas, ganó la Supercopa de Europa en el mes de agosto. ¿Y saben quién anotó? Efectivamente, el ya citado Kylian Mbappé a pase de Jude.
Por si fuese poco, el conjunto blanco cuenta con jóvenes deslumbrantes con un potencial terrible. Arda Güler y Endrick son dos de los pilares sobre los que se cimentará el futuro del Real Madrid. Demuestran personalidad y ganas, solo necesitan el espacio y los minutos suficientes para demostrarlo. Su oportunidad llegará.
Otro punto importante es la directiva, quienes llevan años siendo criticados y a los que el tiempo no deja de darles la razón. Es difícil hacer una gestión perfecta y siempre habrá puntos de fuga, pero los números están ahí. Es complicado ganar más que el Real Madrid, en lo deportivo y en lo económico. Han instaurado un nuevo modelo que es copiado en todo el mundo, ya no se buscan futbolistas hechos, los clubes quieren fichar a las estrellas del futuro. Eso es una dinámica instaurada por el Real Madrid.
Obviamente, no quiero ser necio, es evidente que harán falta refuerzos por las lesiones que ha sufrido el equipo. Sin embargo, me resisto a pensar que no es algo que una directiva tan profesional como ha demostrado no esté planificando ya.
Y a los mandos, aquel hombre que tiene la clave del éxito, una de las personalidades más laureadas del mundo del fútbol, Carlo Ancelotti. El italiano es el principal señalado en esta situación. Es cierto que no está dando con la tecla, pero esta historia ya la hemos vivido antes. Si hay alguien con los conocimientos, el carácter y el tacto necesario para revertir esta situación ese es Carlo.
Nadie mejor que él sabe en la situación en la que se encuentra porque entiende que en el Real Madrid solo vale la victoria. Sabe que el equipo no juega bien, es vulnerable y lo es capaz de encontrar soluciones. Pero esto puede cambiar. A veces es necesario recibir golpes para empezar a despertar. Ancelotti y su equipo tienen los conocimientos para poder cambiar esta situación, quizás no solo pase por lo táctico también por lo emocional.
Carlo se ha dejado la vida y la cara por sus jugadores, nadie más que él tiene la potestad para mirar a los ojos de sus futbolistas y decirles las cosas claras.
Ancelotti es problema y solución, él es la principal llave para dar la vuelta a esta situación. Sabe lo que es ganar en el Real Madrid y su respeto no dependerá de lo que pase de aquí a final de temporada. Ya es una leyenda del club y como tal confío plenamente en que estará a la altura.
El Real Madrid está mal, esa es una obviedad, pero hay razones para creer. Y la más importante es el ADN y el peso de la historia de este equipo, que no permite rendirse ni en los momentos más complicados.
Al madridismo decirle que hemos presenciado cosas mucho más complicadas, con estos mismos jugadores, con este entrenador y con otros diferentes. Es posible tal y como dijo Vini después del clásico: juntos.
Estamos atravesando una situación complicada, pero el Real Madrid siempre vuelve y podemos empezar por este sábado frente a Osasuna. Hasta el final, vamos Real.
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