Las elegantes pintas de Segundo Castillo eclipsan la clasificación de Barcelona en la Libertadores | OneFootball

El entrenador se roba las miradas en los partidos del club ecuatoriano

Más allá del batacazo futbolístico, la elegancia de Segundo Castillo en el banquillo ha sido un tema de conversación más resonante que la propia clasificación de Barcelona de Guayaquil en la Copa Libertadores. Con un estilo impecable y atuendos que derrochan clase, el técnico ecuatoriano ha acaparado miradas y titulares en cada presentación de su equipo.

Sin embargo, su equipo también dejó huella en la cancha. El Corinthians estuvo a punto de lograr una remontada épica en la Copa Libertadores. A pesar de vencer 2-0 a Barcelona de Guayaquil en el partido de vuelta, los ecuatorianos aseguraron su clasificación gracias a la ventaja de 3-0 obtenida en la ida.

Desde el inicio del encuentro, el equipo brasileño salió con ímpetu para revertir la eliminatoria. La primera alegría para los locales llegó en el minuto 39, cuando Félix Torres abrió el marcador con un certero cabezazo desde el centro del área. Rodrigo Garro ejecutó un saque de esquina preciso, y el estadio vibró con la esperanza de una remontada. Sin embargo, el equipo ecuatoriano se mantuvo firme en defensa.

En la segunda parte, el Corinthians siguió atacando y amplió la ventaja en el minuto 83. André Carrillo marcó el 2-0 con otro remate de cabeza tras recibir una asistencia de Gustavo Henrique. Sin embargo, el VAR revisó la jugada antes de validar oficialmente el tanto.

A pesar de los esfuerzos del conjunto brasileño, que generó múltiples ocasiones de gol en los minutos finales, el trabajo táctico  de Segundo Castillo y la defensa de Barcelona de Guayaquil resistió con solidez en la Libertadores. Con el pitazo final en el minuto 96, el 2-0 resultó insuficiente y Corinthians quedó eliminado del torneo continental.

Un equipo que representa la elegancia de su entrenador

Barcelona de Guayaquil, gracias a su contundente 3-0 en la ida, selló su pase a la siguiente fase de la Copa Libertadores, dejando al conjunto brasileño con la amargura de una eliminación que estuvo cerca de revertir. La solidez defensiva y la ventaja obtenida en su casa fueron claves para que los ecuatorianos lograran la clasificación y dieran el gran golpe en el certamen.