Gündogan se sincera sobre su polémico nivel de exigencia y su rol en el FC Barcelona | OneFootball

Ílkay Gündogan fue uno de los grandes líderes del FC Barcelona durante la última temporada. Además de ser el futbolista que más minutos sumó, fue la imagen de la regularidad y liderazgo, aunque no fue suficiente para que los azulgrana sumaran títulos. Ahora, con Alemania en la Eurocopa, está viviendo una situación muy diferente y lo ha repasado en una reciente charla con el medio inglés The Athletic.

El centrocampista ha confesado que le gusta la sensación de ser uno de los 'líderes' del equipo y, también, que le hagan saber cuando se equivoca porque es la única forma para mejorar sus prestaciones: "Me gusta estar al mando del equipo y si el entrenador me dice: ‘Mira Gündo, lo has hecho mal’, lo agradezco porque quiero mejorar. Si es delante de mis compañeros, mejor aún, para que vean lo que tenemos que hacer todos", comenzó diciendo.

Por otra parte, ha reconocido que es importante reconocer cuando te equivocas, sobre todo en el fútbol: "Me considero muy tolerante. Todos somos diferentes y me encanta. No digo que todo el mundo deba pensar como yo porque no soy perfecta. Pero si no eres honesta, tu progreso se estancará. Es la única manera de seguir mejorando". Ha sido una frase que ha recordado a la polémica que vivió en abril con Ronald Araújo por su equivocación contra el PSG.

La temporada de Gündogan en el Barça

Sobre su temporada en el Barça, ha profundizado en el hecho de que tuvo demasiadas posiciones y acabó siendo, para él, un caos: "Con el Barcelona he jugado en todos los sitios donde me han necesitado, así que ha sido un poco caótico, con muchos cambios de posición. He tenido que adaptarme constantemente. A veces, jugar bien también implica saber en qué posición juegas, quién juega a tu alrededor y sentirte cómodo", caso contrario que en Alemania: "En la selección me siento muy cómodo en el campo con mis compañeros y en mi posición".

Aprovechó para hablar sobre Lamine Yamal y su irrupción con solo 16 años: "Lamine tiene solo 16 años, pero es una locura. Simplemente una locura. La confianza con la que juega hace que parezca normal, pero jugar al más alto nivel durante todo el año y llegar a la Eurocopa, ser un jugador clave, no es normal a esa edad", añadiendo que "quiero que Lamine Yamal se mantenga sano y llegue a la cima del fútbol mundial porque ese es su potencial".