Rodrygo: decisión tomada tras el encuentro ante Pachuca | OneFootball

El Enigma Rodrygo: cuando la sonrisa se vuelve interrogante.

El Real Madrid y sus aficionados viven un nuevo capítulo en la intrigante historia de Rodrygo Goes. El atacante brasileño, quien parecía haber reencontrado la alegría en el terreno de juego, se vio relegado a la banca sin un solo minuto de acción ni siquiera un calentamiento, en el reciente choque frente a Pachuca. Una situación que ha reabierto el debate sobre su futuro en la Casa Blanca.

Rodrygo llegó al conjunto merengue con un aura de talento puro y una habilidad innata para desequilibrar partidos, lo que lo convirtió rápidamente en un baluarte en las grandes citas de la Champions League. Era el «niño de las remontadas», ese jugador capaz de aparecer cuando todo parecía perdido. Su discreción, quizás, sumada a una menor repercusión mediática en comparación con otros compañeros, lo situó en una posición vulnerable dentro del cuarteto ofensivo.

Sin embargo, el fútbol, con su implacable memoria a corto plazo, no tardó en cuestionar sus cifras y su irregularidad, así como su personalidad más serena. A pesar de que sus compañeros lo consideran el jugador con más calidad del equipo, la versión más valiosa de Rodrygo es a menudo aquella que, sin grandes alardes, aporta sustancialmente al esquema del entrenador. Esto se hizo evidente la temporada pasada, cuando su desempeño fue el más irregular desde su llegada, con un gol y cuatro asistencias en sus últimos 25 partidos.

De la Recuperación a la Incertidumbre

La pérdida de confianza se apoderó de Rodrygo, quien deambulaba por el césped buscando algo que parecía haberse desvanecido. No era una cuestión de aptitud física o talento, sino de fe en sí mismo. Xabi Alonso, consciente de la situación, había expresado días atrás: «Sé que el final de la temporada no fue fácil para él, pero se tomó un tiempo importante, para resetear. Tampoco fue con la selección. Desde el primer momento hablamos… y lo veo con ganas. Es un jugador con una enorme calidad, hemos compartido cosas y toca ponerlas en práctica».

A pesar de los rumores que lo vinculaban con otros clubes, especialmente de la Premier League, Rodrygo optó por quedarse, buscando una revancha personal en el Mundial de Clubes. En el primer compromiso bajo la dirección de Xabi Alonso, el dorsal 11 fue titular, mostrando destellos de su mejor versión: sonrió, se movió con soltura, pidió el balón y de sus botas nació la asistencia que propició el gol de Gonzalo. No fue su partido más brillante, pero sí un paso significativo para recuperar la alegría perdida desde la final de la Copa del Rey ante el Barcelona el 26 de abril, un encuentro que lo dejó visiblemente afectado tras ser sustituido en el descanso.

No obstante, en la segunda prueba del Real Madrid, Rodrygo quedó fuera de la convocatoria. Una decisión que lo envía «al rincón de pensar» sin una razón aparente, generando la sensación de que no encuentra su lugar en el sistema táctico del técnico tolosarra. Lo más llamativo fue que, a pesar de los cinco cambios realizados por Alonso en la línea de ataque, el brasileño ni siquiera salió a calentar en la segunda mitad. En contraste, Víctor Muñoz sí tuvo minutos por segundo partido consecutivo. Esta situación, sumada a la explosión de Arda Güler, la inminente llegada de Mastantuono y el cambio de esquema, reabre el «caso Rodrygo«, planteando nuevos desafíos en su camino dentro del conjunto blanco.