Recibió las primeras órdenes: Mbappé descubrió en Mallorca quién manda en el Madrid | OneFootball

El Real Madrid decepcionó en su estreno en LaLiga en Mallorca. La inclusión de Mbappé no sirvió para desnivelar el partido, y la estrella francesa descubrió en Son Moix quién manda en su nuevo vestuario.

Hubo una reunión en el túnel de vestuarios, poco antes de saltar al césped de Son Moix en la segunda mitad.

Allí las estrellas del Real Madrid compartieron sus últimas impresiones y sacaron conclusiones tras lo vivido en la primera mitad.

La conversación fue captada por las cámaras de televisión dejando al descubierto la jerarquía existente en el vestuario blanco.

"Vosotros tres acabad las jugadas porque correr para atrás es muy duro"

Allí estaban Vinicius, Rodrygo, Bellingham y Mbappé  en animada conversación intercambiando opiniones sobre el partido que empezaba a complicarse para el Real Madrid.

El inglés todavía no había aparecido por allí cuando Vinicius, Rodrygo y Mbappé comparten confidencias sobre el cambio de posiciones entre ellos.

Mbappé dijo: "Yo creo que cuando cambiamos no nos esperan ahí. Y tú puedes dar pases al otro lado, rápido". Mbappé se refería a Vinicius, mientras éste y Rodrygo asentían.

Y poco después apareció en escena Jude Bellingham, impartiendo órdenes en inglés: "Vosotros tres, acabad las jugadas, porque correr hacia atrás... es muy duro".

Mbappé asentía y corroboraba sus palabras: "Eso es lo que yo digo, tenemos que acabarlas con algo".

"Inténtalo, crea un espacio y chuta"

Y Bellingham le animó a hacerlo: "Inténtalo, inténtalo. Crea un espacio y... (con un gesto le dice que dispare a puerta)".

Era el momento de volver al terreno de juego. Y Rodrygo acabó la charla con un "a jugar, a jugar".

En esa charla informal, Mbappé descubrió el orden jerárquico que impera en su nuevo equipo, en donde Jude Bellingham lleva los galones.

Un año le ha costado ser el jefe en ese vestuario. Mbappé debe imaginar que es lo que le puede costar a él estar a su altura.

Pero se lo deberá ganar en el campo con goles, victorias y títulos, como hizo Bellingham la temporada pasada, rindiendo a un nivel muy superior al que se esperaba de él.