Florentino se harta y toma el control del caso Vinicius | OneFootball

La tensión ha ido creciendo en silencio, pero la última exigencia del entorno ha sido la gota que ha colmado el vaso. El presidente ha decidido intervenir directamente.

Hay calma en apariencia, pero el asunto preocupa. La renovación de uno de los líderes del proyecto de Xabi Alonso sigue empantanada. Y no por falta de voluntad. El contrato de Vinicius Jr vence en 2027, pero su entorno ya ha activado el plan para igualarle con la gran referencia del vestuario: Kylian Mbappé.

En los últimos días, varias informaciones, como la de la Cadena SER, han apuntado que el delantero ha pedido situarse a la altura salarial del francés. Y los números explican el conflicto. Mientras Mbappé roza los 30 millones de euros limpios por temporada, Vinicius Junior no llega ni a los 20. La nueva demanda, según fuentes cercanas a la negociación, es de al menos 25 millones fijos más variables.

Ese montante supera de largo el acuerdo verbal alcanzado en su día entre club y agente. Y no ha sentado nada bien en las oficinas del Santiago Bernabéu, donde consideran que el momento no es el más oportuno tras una temporada irregular del jugador. El club, de momento, mantiene la sangre fría y no piensa dejarse llevar por la presión del representante.

La situación ha derivado en un atasco evidente. Solo una figura puede desbloquearlo: Florentino Pérez. Según la misma fuente, el presidente se implicará de forma directa y ya valora reunirse personalmente con el jugador, dejando al margen a su agente. La intención es clara: ampliar su contrato hasta 2030 y consolidarle como piedra angular del nuevo proyecto blanco.

Pero el contexto se complica. La conexión entre Mbappé y Vinicius no ha funcionado como se esperaba. Y eso, unido a su menor rendimiento en la recta final de curso, ha generado dudas en la parcela técnica. Xabi Alonso, que arrancará su primera pretemporada desde cero, sigue confiando en él, pero espera mucho más.

A esto se suma el ruido que llega desde Arabia Saudí. En febrero, representantes del jugador mantuvieron reuniones con altos cargos de la Saudi Pro League en Praga. No hubo oferta formal, pero sí propuestas tentadoras: hasta 350 millones de euros para convertirle en el segundo deportista mejor pagado del mundo, solo por detrás de Shohei Ohtani.

Por ahora, el brasileño disfruta de sus últimos días de vacaciones. Ha estado en Río de Janeiro, su ciudad, donde siempre regresa para recargar energía. Pero a la vuelta espera un escenario exigente: un nuevo curso con muchas expectativas… y con una renovación que marcará su futuro y el del Real Madrid.