Eric García, de discutido a indiscutible en el Barcelona de Flick | OneFootball

El Barcelona ha comenzado la temporada con una sorpresa inesperada: Eric García. El defensor catalán ha dado un giro completo a su situación en el club y se ha convertido en una pieza clave para Hansi Flick, demostrando que la perseverancia puede cambiarlo todo

El técnico alemán no dudó en poner a Eric García de titular en el debut liguero en Son Moix ante el Mallorca, dejando en el banquillo a Jules Koundé, un habitual de la campaña pasada. Esta decisión no fue solo táctica: confirmó que el canterano ha ganado la confianza plena de su entrenador. La trayectoria reciente de Eric es una historia de paciencia y esfuerzo. Tras su destacada cesión en el Girona, muchos pensaban que su regreso al Camp Nou sería breve. Con dudas sobre Christensen y Araujo, la dirección deportiva decidió mantenerlo, aunque inicialmente su papel sería limitado como recambio en la defensa.

La temporada anterior fue todo un desafío para Eric García, que tuvo que esperar su momento mientras otros se consolidaban en el eje defensivo. En diciembre, Flick le dejó claro que las oportunidades serían escasas. Según Sport, el Girona intentó repatriarlo en invierno, pero el técnico alemán lo convenció de quedarse y luchar por un puesto. Esa decisión cambió por completo su destino. Poco a poco fue entrando en la dinámica del equipo, primero como central y luego en posiciones inesperadas como pivote o lateral derecho. Su polivalencia fue decisiva y terminó la temporada con actuaciones destacadas y goles importantes.

El Barcelona ya contempla la renovación de Eric García. La apuesta de Flick no fue casual: tras comprobar su evolución, pidió a Deco que se trabajara en la extensión del contrato hasta 2029. El entrenador busca asegurar la continuidad de un jugador con jerarquía y capacidad para asumir responsabilidades en partidos importantes.

El verano y el Trofeo Gamper dieron otra señal clara: Eric García partió como titular por delante de Koundé. En el estreno liguero en Mallorca, volvió a recibir la confianza del técnico. Aunque el francés pueda recuperar su sitio, el mensaje de Flick es claro: juega quien rinde. Hoy, Eric es mucho más que un recambio; se ha ganado a la afición, es indiscutible para el entrenador y su salario no refleja aún la importancia de su papel en el equipo.

En un Barça que busca reafirmar su identidad bajo Flick, Eric García es símbolo de compromiso y fiabilidad. Su versatilidad, madurez y capacidad de adaptación lo han convertido en una pieza estratégica. Más allá de los nombres rutilantes, el canterano ha conquistado un lugar central en el proyecto azulgrana, demostrando que reinventarse y superar la adversidad puede transformar una carrera.