Fulbo Divino
·3 maggio 2025
Continúa la maldición de Harry Kane: Al Bayern Múnich se lo empataron sobre el final y todavía no pudo consagrarse campeón

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·3 maggio 2025
Harry Kane sigue cargando con el estigma que lo persigue desde sus inicios como profesional: a los 31 años, aún no ha ganado un título. Esta vez, la frustración tuvo escenario en Alemania, donde el Bayern Múnich dejó escapar la consagración en la Bundesliga de manera agónica ante el Leipzig.
Escrito por Luki Gargiulo (x: @luki_gargiulo)
Con una ventaja de ocho puntos sobre su escolta, el Bayer Leverkusen, los bávaros sabían que una victoria en el Red Bull Arena les garantizaba su decimotercer título consecutivo en el torneo local. Pero, cuando todo parecía encaminado al festejo, Yussuf Poulsen marcó el 3-3 en el cuarto minuto de descuento y arruinó los planes de Kane y compañía.
El delantero inglés no pudo jugar por lesión, pero no quiso perderse el posible hito. Estuvo presente en las tribunas y bajó al campo en los últimos minutos, ilusionado con celebrar el primer título de su carrera. Pero el desenlace fue otro.
El Bayern comenzó en desventaja: Benjamin Sesko (11′) y Lukas Klostermann (39′) pusieron en ventaja al Leipzig. La reacción fue inmediata en el complemento con goles de Eric Dier (62′), Michael Olise (63′) y Leroy Sané (83′), que parecían sentenciar la historia.
Todo apuntaba a una fiesta en Múnich… hasta que Poulsen, ya en tiempo añadido, silenció la celebración. El rostro de Kane, goleador de la Bundesliga con 24 tantos, fue el reflejo de una película que ya conoce demasiado bien: la del título que se le escapa por centímetros.
El Bayern todavía tiene la primera opción para coronarse campeón, incluso sin jugar. Necesita que el Bayer Leverkusen no gane este domingo ante el Friburgo. Un empate o derrota del equipo de Xabi Alonso le dará el título al elenco muniqués.
En caso contrario, la definición se estirará una jornada más. Ahí, el Bayern deberá sumar ante el Borussia Monchengladbach para poder levantar el trofeo en su casa, el Allianz Arena, y romper, de una vez por todas, con la sequía personal de Harry Kane.