Grada3
·26 dicembre 2024
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El 2024 da sus últimos coletazos y es momento de hacer balance. En el caso del Compos podríamos decir que ha sido un año con más pena que gloria, un año de quiero y no puedo que acaba con el Playout pisando los talones del equipo y con la promoción de ascenso a 4 puntos. Subir de categoría es el objetivo establecido en la entidad desde hace ya varias temporadas, pero siempre parece fallar algo que aleja ese ansiado ascenso.
Para hablar del comienzo del año, miremos primero un poco más atrás. Dice el refrán que a perro flaco todo son pulgas y en el Compos se aplicaba ese dicho a la perfección. Los blanquiazules contaban con solo un triunfo en el casillero y quedaba muy atrás, en la jornada 2 de competición. Desde ese momento feliz en el Vero Boquete el equipo gallego solo había vivido derrotas en casa (ante Zamora, Ourense y Villalbés) y empates fuera (Covadonga y Fabril). Un pésimo balance que llevó al equipo a descenso y a verse obligado a hacer una profunda ‘limpieza’ destituyendo al cuerpo técnico en bloque (Manel Menéndez, Pablo y Cardeñosa) así como al director deportivo (Castiñeiras). Un pulsar el botón de reseteo que los picheleiros esperaban sirviese como revulsivo. La llegada de Míchel Alonso actuó como tal ya que en su primer duelo al frente de los blanquiazules el conjunto picheleiro logró volver al triunfo y sumar 3 puntos que lo sacaron del descenso tras imponerse 3-4 a la Gimnástica.
El trabajo no hacía más que empezar, tocaba demostrar la mejoría en casa y los blanquiazules, que estrenaban patrocinio de Lenovo y Motorola, lo hicieron a los grande venciendo al Promesas 4-1. Un buen hacer que se trasladaba a Copa donde hicieron sudar al Tenerife para lograr el pase. Sin embargo, esa progresión se vio cortada en su visita al fortín de Ganzábal donde el Langreo se impuso con un gol a balón parado en un saque de esquina que no lo era. La derrota no apagó a los gallegos que, de vuelta en casa, se impusieron al Cayón, a domicilio al Guijuelo y en casa al Coruxo. Un gran trabajo que se vino abajo en su visita a Pasarón un partido que se perdió 3-0 y se acabó con 9. Se repuso el Compos de las adversidades y con golazo de Antón de Vicente sumaron ante el Vetusta tres puntos que dejaban la zona noble a tiro de piedra. El año acababa con dertota ante el Real Avilés y con los blanquiazules tienen 24 puntos, sextos y con el Playoff a 2 puntos.
El 2024 no pudo empezar con mejor pie al imponerse en casa al Rayo Cantabria colándose así en el quinto puesto, pero la alegría duró poco al llegar la bestia negra llamada Marino de Luanco que se llevó los tres puntos del Vero Boquete y sacó a los blanquiazules de la zona noble. A pesar de esa derrota ante su afición la fortaleza del Compos como local le valió para sostenerse ante malos resultados fuera de casa ante Zamora o Ourense, llamados al ascenso, y seguir en la lucha por el Playoff. Sin embargo, el equipo vivió una dinámica de 4 partidos sin vencer que acabó con la derrota por la mínima en casa ante el Langreo que llevó a Michel Alonso a dimitir. El técnico de Ferrol no estaba dando con la tecla y la derrota frente al conjunto asturiano fue la gota que colmó el vaso.
De nuevo la estabilidad en el banquillo era prácticamente inexistente. Y lo cierto es que los datos de la esedé son abrumadores, pues Míchel Alonso es el cuarto entrenador que dejaba el club en menos de un año. Incluso serían cinco en caso de contar a José Manuel “Cardeñosa”, que dirigió al equipo de forma interina durante un par de partidos. Con la salida del técnico ferrolano cogió el banquillo Antón Permuy, una apuesta por un hombre que ya estaba en el organigrama del club y conocedor de una cantera por la que se quería apostar.
Antón Permuy cogió al equipo en el puesto 8, con 36 puntos, a 2 del Langreo que marcaba la zona noble. Su primer partido en el banquillo no cumplió el dicho de entrenador nuevo, victoria segura sino todo lo contrario. Derrota por 4-0 ante el Cayón a domicilio fue el estreno del técnico en el primer equipo. Eso sí, a partir de ahí el conjunto blanquiazul no supo lo que era perder hasta la última jornada. De hecho, la ‘esedé’ llegó a la última jornada con opciones de colarse en Playoff, eso sí, sin depender de sí mismo. Para conseguir el final feliz debían ganar y que el Langreo pinchase y no sucedió ninguna de las dos premisas. El curso acababa con los compostelanos séptimos con 47 puntos, a 4 de la promoción de ascenso. Se moría en la orilla y los deberes quedaban por hacer.
Con el fin de la temporada llegan las vacaciones y el trabajo en los despachos para reconfigurar un equipo y llevarse, ahora si, al éxito en forma de disputar el Playoff. En ese sentido, en el banquillo se apostó por la continuidad. Antón Permuy seguía al frente de un proyecto en el que hubo despedidas como Pato Guillén, Borja Rey, Euse, Araújo, Escoruela, Antón de Vicente, Jordan Domínguez, Jaime Santos, Manu Ramírez, Juampa, Pep Caballé o David Grande, entre otros, pero, a su vez, se ha reforzado con nombres como Rabanillo, Iago Domínguez, Ocaña, Manu Rivas, Fer Cano, Diego González, Guiliano Bertino, Óscar Gil, Santi de Prado o Carlos Cinta y ha subido a jugadores del filial como Xoel o Landeira.
De nuevo con el objetivo de Playoff y con mucha ilusión empezaba una temporada que, como casi siempre empezando a domicilio, no empezó con buen pie. El Compos sumaba solo 1 punto en el casillero y ocupaba puestos de descenso. Este balance de 1 punto de 9 es el peor inicio de curso de los blanquiazules desde que existe Segunda RFEF. La cosa no fue a mejor con la visita del Langreo al Vero Boquete que ahondó en una herida que solo encontraba cura en Copa RFEF donde el conjunto blanquiazul fue pasando rondas hasta colarse en Copa del Rey, eso sí, no pudo imponerse en la final ante el Extremadura.
En Copa del Rey el duelo con el Alavés mostró también ese mantra del quiero y no puedo donde el equipo se mostró mejor que todo un Primera pero se quedó con las ganas. Ese duelo fue como un punto de inflexión ya que el equipo vivió una gran dinámica que lo sacó del pozo y lo hizo mirar la zona noble de cerca. El Compos vivió una racha de 7 partidos sin perder. Los de Antón Permuy no cayeron derrotados en Liga desde el 13 de octubre hasta el 8 de diciembre ante la Gimnástica en El Malecón. Y es que cuando más cerca parecía la zona noble y el equipo más enchufado parecía, el año acaba dos derrotas, Gimástica y Promesas a domicilio, y un empate, Real Ávila en casa, en el mes de diciembre.
El equipo se ha visto frenado en este último mes y dada la igualdad del Grupo I ven el Playout más cerca que el Playoff ahora mismo. Concretamente, el balance de los compostelanos en la primera vuelta ha sido de 6 victorias, 4 empates y 7 derrotas que lo dejan en el puesto 12 con 22 puntos en el casillero. Por arriba la zona noble queda a 4 puntos, mientras que por debajo el Playout está a solo 1 puntos y en descenso a 5.
Las lista de propósitos de año nuevo de los blanquiazules incluye: recuperar la buena dinámica de resultados, volver a dejar la puerta a cero (algo que durante su gran dinámica logró hacer 5 semana consecutivas), mejorar la capacidad goleadora (quitando los equipos de descenso, el conjunto de Antón Permuy es, junto al Real Ávila, el menos goleador con 17 dianas) y dar más alegrías a una afición que este año ha mostrado su apoyo rozando casi los 3.000 abonados, objetivo que se marcan desde el club para esta segundo vuelta en la que lograr el objetivo, luchar por el ascenso.