La Colina de Nervión
·20 September 2024
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El Real Valladolid cerró el mercado de fichajes veraniego con varios movimientos importantes. En forma de cesión, se incorporaron al conjunto pucelano nombres como Cenk Özkaçar, Mario Martin, Karl Hein o Eray Cömert. La única cara nueva que se ha incorporado como un traspaso ha sido Juanmi Latasa. El resto de operaciones han sido opciones de compra que ejecutaron los blanquivioletas tras el ascenso. En este contexto, aparecen figuras como Stipe Biuk, André Ferreira, Amath Ndiaye, Stanko Jurić, Victor Meseguer o Raúl Moro. Este último fue protagonista a lo largo de este verano y también lo está siendo en los terrenos de juego.
Ronaldo tuvo mucho trabajo en este mercado de fichajes para gestionar las operaciones del Real Valladolid. En el caso de Raúl Moro, los pucelanos ejecutaron la opción de compra de dos millones de euros para quedarse de forma definitiva con el extremo catalán. Este llegó cedido el verano anterior y Pezzolano quedó encantado con sus prestaciones. Dicho movimiento fue complicado de cerrar debido a que dependían del fair play financiero, el cual finalmente no supuso ningún problema. En su cesión, el atacante era propiedad de la Lazio, club al cual llegó en 2019 por seis millones de euros, siendo una apuesta de futuro y una inversión importante para los italianos.
Raúl Moro centra en un partido entre Real Valladolid y RCD Espanyol. | Imagen: Real Valladolid
Tras aterrizar en las categorías inferiores de la Lazio, años más tarde Raúl Moro buscó minutos en calidad de cedido en el Ternana y en el Oviedo. Finalmente, el Valladolid terminó siendo su lugar de más acomodo. Esta temporada ya suma dos goles y un rendimiento más que notable. Llegar hasta aquí no fue sencillo para el catalán.
Tras el mercado de fichajes, el extremo del Real Valladolid cuenta para Mundo Deportivo cómo fue irse a la Lazio con tan solo dieciséis años. «La decisión no fue difícil. Yo lo tenía muy claro. El estar ahí me ha hecho un hombre por así decirlo. Al final con dieciséis años, lo que pagaron por mí, hace que suenes pero es normal. Tengo la espinita clavada de saber qué hubiera pasado con otra mentalidad. También creo que se podía haber gestionado de otra manera porque un jugador con 17/18 años al que le das una confianza enorme pagando ese dinero y luego le cierras la puerta tan temprano…», explicó Raúl Moro. Una experiencia que el futbolista cambiaría debido a la clara juventud con la que la afrontó.