Agosto se pone intenso para el Celta | OneFootball

Foto: Jack Thomas / Getty Images

Hasta hace no mucho, agosto era sinónimo de calma en el mundo del fútbol. Los torneos veraniegos marcaban un mes relajado, ligado a las vacaciones, que con el paso del tiempo ha ido perdiendo su carácter pausado. El adelanto del inicio liguero, que ya se sitúa a mediados de mes,  ha transformado agosto en un periodo cada vez más competitivo.

Este año, sin embargo, el mes será especialmente exigente para el Celta. Antes del primer parón por compromisos internacionales, disputará cuatro partidos de Liga, tres de ellos en Balaídos, debido al adelanto de la jornada intersemanal para los equipos que compiten en la Europa League, en este caso Celta y Betis.

El maratón comenzará el domingo 17, a las 17:00, con la visita del Getafe. Un equipo de Bordalás siempre plantea un desafío, y el Celta lo sabe bien: ese estilo de “esto es fútbol, papá” se le ha atragantado en más de una ocasión. Y aunque el último partido de la pasada temporada se saldó con un triunfo celeste ante los azulones, el estreno liguero poco tendrá que ver con aquel encuentro.

A partir de ahí, el ritmo se intensificará: tres partidos en apenas ocho días cerrarán el primer bloque de la temporada. El sábado 23, también a las 17:00, los de Benítez visitarán Son Moix para medirse a un Mallorca en clara progresión en las últimas campañas y rival directo en la lucha por Europa el curso pasado.

Cuatro días más tarde, el miércoles 27 a las 21:00, el Celta recibirá en Balaídos al Betis, en otro compromiso de alto voltaje. Y el domingo 31, de nuevo en casa y a las 17:00, el rival será el Villarreal, en un duelo con claro aroma europeo.

En resumen, el arranque liguero del Celta no puede ser más exigente: cuatro partidos en quince días y frente a rivales de entidad. El balance que logre en este tramo inicial marcará en gran medida sus opciones en LaLiga. Porque, tras el parón de septiembre, llegará la Europa League… y entonces, lo de “mes intenso” se quedará corto para describir lo que le espera al conjunto celeste.