Ultras del Sevilla asaltan la Ciudad Deportiva tras la derrota ante el Celta | OneFootball

La tensión se desbordó anoche en Sevilla tras la derrota del equipo nervionense en Vigo (3-2), un resultado que deja al conjunto andaluz al borde del descenso, con apenas seis puntos de margen y solo nueve por disputarse. La frustración de la afición derivó en una noche esperpéntica que tuvo como epicentro la Ciudad Deportiva José Ramón Cisneros Palacios.

Más de un centenar de aficionados se concentraron frente a las instalaciones para cargar duramente contra el equipo, exigir responsabilidades por la crítica situación deportiva y mostrar su indignación por la deriva del club. Lo que comenzó como una protesta acabó convirtiéndose en un episodio de extrema violencia.

La llegada del autobús del primer equipo estuvo marcada por momentos de gran tensión. Bajo un fuerte dispositivo de seguridad compuesto por agentes de la Policía Nacional y la Guardia Civil, los cuerpos de seguridad se vieron obligados a intervenir disparando al aire con pistolas de bolas para contener a los hinchas, que respondieron con insultos y lanzamientos de huevos.

La situación escaló rápidamente cuando los aficionados derribaron la puerta principal de la Ciudad Deportiva y accedieron al área del primer equipo. Ante la gravedad de los hechos y por motivos de seguridad, la plantilla sevillista se vio obligada a pasar la noche en las instalaciones.

El club reaccionó en la mañana del domingo con un comunicado oficial en el que condena "de manera contundente el ataque vandálico organizado" y califica los hechos como "agresiones de inusitada violencia" contra jugadores, técnicos y empleados. El Sevilla FC subraya que, si bien entiende las protestas por la situación deportiva, no tolerará "acciones vandálicas, amenazas ni agresiones".

En el mismo escrito, la entidad anunció que denunciará el asalto ante las autoridades y colaborará activamente para identificar a los responsables. “El Sevilla FC solicita a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad la máxima diligencia para llegar hasta los últimos responsables de estos hechos deleznables”, añade el comunicado.

El club también se compromete a actuar "de manera inflexible" en caso de que los implicados sean socios o aficionados identificados del Sevilla FC, mostrando así una postura tajante frente a la violencia.

La noche de tensión refleja el momento crítico que atraviesa la entidad, tanto en lo deportivo como en lo social, con una afición al límite de la paciencia y un equipo que se juega la permanencia en las últimas tres jornadas del campeonato.