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·4 janvier 2025
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El Real Madrid venció 1-2 al Valencia, pero un penalti fallado por Jude Bellingham generó controversia entre los aficionados madridistas.
Las críticas se centraron en la posición del portero valencianista Dimitrevski y el ingreso anticipado al área de un jugador rival, cuestionando la interpretación del reglamento en esta jugada.
El penalti de Bellingham, con el marcador en 1-0 a favor del Valencia, terminó golpeando el poste, desencadenando las quejas del madridismo. Según las imágenes, Dimitrevski no tenía ningún pie sobre la línea de gol al momento del lanzamiento, y Yarek, defensor del Valencia, ingresó al área antes de tiempo. Sin embargo, el reglamento es claro en este tipo de situaciones y no justificaba la repetición del tiro.
De acuerdo con el artículo 14.2 de las reglas del fútbol, un penalti solo debe repetirse si la infracción del portero influye directamente en el lanzador. En este caso, el balón no fue desviado por Dimitrevski, sino que impactó directamente en el poste. Por ello, el árbitro Soto Grado consideró que la posición del guardameta no afectó el resultado del disparo de Bellingham.
Respecto a la entrada anticipada de Yarek al área, las reglas estipulan que el VAR evalúa si la infracción condiciona a un rival con posibilidad de aprovechar un rebote. Según explicó Mateu Lahoz en declaraciones a COPE, el hecho de que ningún jugador del Real Madrid estuviera cerca para beneficiarse del rechace impidió que se tomaran medidas desde la cabina arbitral.
Esta decisión alimentó la frustración del madridismo, que reclamó un trato más estricto hacia el cumplimiento de las normas. No obstante, la interpretación arbitral respaldada por el reglamento deja claro que el penalti fallado por Bellingham no debió repetirse bajo las circunstancias presentadas.