Marchesín, inamovible para Russo en Boca pese a su bajón futbolístico | OneFootball

En este presente de crisis futbolística, domingo a domingo se renuevan las dudas en la formación de Boca. Desde que llegó hace poco más de dos meses, Miguel Ángel Russo todavía no repitió los mismos once, lo que expone a las claras la irregularidad y la falta de funcionamiento. Pero, en esa marea de incertidumbre, una de las pocas certezas que tiene el cuerpo técnico es que Agustín Marchesín es inamovible.

Pese al bajón futbolístico de las últimas semanas, donde quedó bajo el cuestionamiento de algunos hinchas por ciertos partidos en los que no dio seguridad y hasta tuvo fallas puntuales (por ejemplo, en el segundo gol ante Atlético Tucumán que condenó al Xeneize a la eliminación de la Copa Argentina), internamente aseguran que es titular indiscutido.

La experiencia, categoría y el rol de referente que tiene Marchesín no da lugar a que Russo ni su staff se planteen la posibilidad de darle minutos a Leandro Brey. Otro factor extra es que, más allá de que el juvenil surgido en Los Andes ya demostró su calidad y estuvo a la altura cuando le tocó, sus 22 años para un puesto tan drástico en esta actualidad turbulenta de Boca pesan.

El caso de Milton Delgado es un ejemplo que puede servir de referencia. Ni bien Russo asumió en su tercer ciclo en Boca, cuando el volante era titular y una de las pocas piezas regulares del equipo de Fernando Gago, decidió sacarlo -entre otras cosas- porque «es muy jovencito». «En esto hay que saber llevar las cosas, los tiempos, las formas. Veremos todo», añadió luego ante las críticas por su suplencia.

¿Y Sergio Romero? El competidor natural de Marchesín, por trayectoria y jerarquía, está fuera de la pelea. Desde el episodio con el plateísta en 2024 y la posterior operación de rodilla, no volvió a jugar en 2025 y ni siquiera es tenido en cuenta para formar parte de los convocados para los partidos. Su contrato termina a fin de año y, salvo una salida prematura, se irá del club en condición del libre.

Entonces, principalmente porque el cuerpo técnico confía mucho en él y en segundo plano dado que sus aspirantes al arco no le ejercen una puja que lo haga tambalear, Marchesín se mantendrá como titular en el Boca de Russo pese a haber mermado el rendimiento en diciembre.