La formación que Hansi Flick planea si llega al FC Barcelona | OneFootball

El FC Barcelona podría experimentar un cambio significativo en su banquillo. Hansi Flick, exentrenador del Bayern Múnich y de la selección alemana, se perfila como el principal candidato para suceder a Xavi Hernández, quien podría salir del club tras la última jornada en un movimiento que podría revolucionar el mercado de fichajes culé.

Estilo y formación: El 4-2-3-1 de Flick

Hansi Flick es conocido por su enfoque táctico basado en el 4-2-3-1, un sistema que promueve un fútbol vertiginoso y una presión constante. Esta formación ha sido clave en sus anteriores éxitos, incluyendo la notable temporada 2019-2020 con el Bayern Múnich, donde conquistó la Bundesliga, la Copa de Alemania y la Liga de Campeones.

Presión Alta y físico excepcional: La clave del éxito

De acuerdo con Jordi Gil, un aspecto fundamental en la filosofía de Flick es el trabajo físico. Contrario a la tradición del Barcelona, donde la técnica y la posesión han sido siempre la prioridad, Flick quiere que sus jugadores sean como «motos», capaces de presionar incansablemente y ahogar a sus rivales. Este enfoque exige un nivel de acondicionamiento físico excepcional, algo que podría requerir un cambio significativo en la preparación de los jugadores del Barça.

Según Toni Juanmartí de SPORT, las posibilidades de que el FC Barcelona traiga un nuevo entrenador han aumentado considerablemente tras los últimos eventos. En las últimas horas, se ha avanzado mucho en las conversaciones con Hansi Flick, aunque existen sectores cercanos a Joan Laporta que prefieren a Rafa Márquez para el puesto.

RAC ha confirmado que se llevó a cabo una reunión entre Hansi Flick y la delegación del FC Barcelona. Las sensaciones tras el encuentro fueron muy positivas, con una «muy buena» armonía entre todas las partes. Esto ha consolidado a Flick como el candidato número uno para reemplazar a Xavi, en caso de que el actual técnico decida abandonar su cargo.

La llegada de Hansi Flick podría marcar el comienzo de una nueva era en el FC Barcelona, una que combine la histórica técnica del club con un enfoque físico y táctico más moderno y exigente. Si las negociaciones culminan con éxito, los aficionados culés pueden esperar un equipo que no solo domine la posesión, sino que también asfixie a sus oponentes con una presión incesante, redefiniendo lo que significa jugar al estilo Barça.