Zidane subirá hasta el cielo | OneFootball

El Real Madrid y la escalera al triunfo

Stairway to Heaven (“Escalera al cielo”) es una canción de los británicos Led Zeppelin, compuesta por Jimmy Page y Robert Plant allá por 1971. Si ustedes no la conocen, cosa que dudo, les invito a que la escuchen mientras leen este artículo. Spoiler: la canción les va a durar mucho más que la lectura. Ocho minutos y cuarenta y cinco segundos que empiezan con una guitarra suave y unos sonidos de viento de fondo, acompañados de la voz de Robert Plant, que en este momento parece más recitar que cantar. Todo es calma y poco nos hace pensar en lo que se vendrá encima pasados los minutos. Cambiando de tema, el pasado sábado el Real Madrid ganó 2-3 al Betis con el protagonismo del VAR una vez más de por medio. Como del tema del VAR ya les escribí en julio en un artículo titulado “Escrito de defensa”, doy por cerrado ese asunto.

La cuestión está en que en los dos partidos de liga que llevamos disputados, el equipo parece falto de fuelle e incluso el sistema es errático. En San Sebastián jugamos sin un delantero puro y en Sevilla probamos a dos de los tres que tenemos. No jugó Casemiro en el primer partido y sí en el segundo, aunque se le vio flojo. De jugar abiertos con dos extremos (los brasiniños) a olvidarnos de ambos en una semana. Del 4-3-3 al rombo. ¿Se ha convertido Zidane en un científico loco que mezcla ingredientes sin sentido y hace probaturas carentes de criterio? Pues un poco hay de esto. Tras una temporada en la que los jugadores se tiraron sin tocar un balón cuatro meses (dudo que desde que son futbolistas hayan tenido un tiempo de descanso tan largo)  y de repente fueron llamados a filas para una campaña de once partidos en un mes, pararon otra vez el 13 de julio y retomaron la Copa de Europa el 7 de agosto. Tras caer eliminados el equipo, y no todo, volvió a entrenar el 29 de agosto. Así que si ustedes lo piensan un poco, aunque de facto estemos jugando la liga, el Real Madrid está en estos días disputando el Teresa Herrera, el Ramón de Carranza o cualquier trofeo de verano que se les pueda venir a la cabeza, concebidos estos para que los técnicos vayan ensayando sus tácticas y para que los jugadores se pongan en “forma competitiva”, que es la que no da los meros entrenamientos. A todo esto, si siguieron mi consejo y tienen de fondo Stairway to Heaven ya habrá aparecido la batería, la guitarra ha tomado potencia y la voz de Plant suena más desgarrada.

Así que, pese a estar disputando la liga, Zidane está en su laboratorio de Valdebebas y los jugadores van ajustando su ritmo a la competición, el equipo se irá adaptando y el laboratorio pasará a ser un centro de precisión en el que Zidane, cual relojero suizo, ajustará a los unos con los otros en el sistema que convenga según las circunstancias. Si hacen memoria, el arranque de la temporada pasada fue algo parecido y el final se ejecutó a velocidad de crucero. Algo similar está pasando este año, empezamos como un blues y viendo los precedentes todo hace indicar que terminaremos como un rock and roll, subiendo hasta el cielo por la escalera que estamos construyendo y que Page y Plant compusieron hace años. Pero recuerden, el camino es largo y lleno de imprevistos, no conviene bajarse cuando sólo hemos subido un par de peldaños.

Fotografías Getty Images.