Xabi Alonso y como juega su Real Madrid | OneFootball

La victoria por 3-0 del Real Madrid sobre el Salzburgo en el Mundial de Clubes 2025 no fue un simple trámite. Más allá del marcador, el encuentro dejó al descubierto un equipo en plena transformación. Tras el sólido 3-1 ante Pachuca, logrado incluso jugando en inferioridad numérica desde el inicio, los blancos volvieron a brillar. Esta vez, con once contra once, desplegaron un fútbol dominador, efectivo y repleto de señales sobre lo que podría ser la era Xabi Alonso.

Bajo la batuta de Alonso, el equipo ya muestra una evolución táctica notable. La presión alta en los primeros 30 minutos ante los austriacos fue implacable: asfixiante, precisa y bien coordinada. A esto se sumó una circulación fluida del balón y un posicionamiento estratégico que favoreció el talento individual sin comprometer el bloque colectivo.

El Real Madrid empieza a moldearse como un conjunto camaleónico, con capacidad para variar esquemas, roles y ritmos de juego según lo exija el rival. Y ante Salzburgo, esa versatilidad se expresó claramente en el uso de una defensa con tres centrales.

Con este dibujo, Aurélien Tchouameni se sintió cómodo como ancla en la base del mediocampo, liberado de excesiva carga defensiva. Por su parte, el joven Huijsen aprovechó para soltarse en la salida de balón sin quedar tan expuesto a sus espaldas, mientras que Antonio Rüdiger, aún recuperándose físicamente, cumplió con solvencia sin necesidad de forzar su cuerpo.

El estilo de juego le va a dar mucho al Real Madrid, una estilo de juego donde para muchos ahora si el Madrid va jugar «bonito», y va cumplir con lo que muchos siempre crritican que el equipo blanco juega mal, pero saben ganar títulos.