Villarreal bajó al Celta con un agónico 4 a 3 y es líder en La Liga tras un partidazo | OneFootball

El Submarino Amarillo y los Celestes ofrecieron un espectáculo magnífico, sobresaliente, apoteósico. En el inicio de la tercera jornada de La Liga, el equipo de Marcelino corrió de atrás pero lo dio vuelta. Y el 4 a 3 agónico no sólo dejó a los de Galicia sin punta sino que colocó a los de Castellón en lo más alto.

Fue un partidazo por donde se lo mire. Celta de Vigo abrió la cuenta bien temprano en un pelotazo largo de Ilaix Moriba. El arquero de Villarreal salió a cortar a destiempo pero Alfon González lo esquivó, remató, y en el rebote apareció Borja Iglesias para empujar al fondo de la red.

Lo que era soñado para los de Claudio Giráldez se transformó en un dolor de cabeza porque el dueño de casa fue a buscar la igualdad. Lo tuvo Álex Baena con un derechazo que tapó Iván Villar y, en la jugada siguiente, cayó el 1 a 1 en un córner desde la izquierda que peinó Gerard Moreno y empujó Sergi Cardona.

El ida y vuelta se tornó incesante en el período inicial. Celta volvió a ponerse arriba con un golazo de tiro libre de Óscar Mingueza en una temporada fantástica del zaguero. Y si bien pudieron ponerse 3 a 1 en una jugada que salvó Raúl Albiol con lo justo, Villarreal volvió a coquetear con la igualdad en un cabezazo de Yeremi Pino al palo.

En la complementaria lo dio vuelta Villarreal pero Celta lo asustó

Una ráfaga del Submarino Amarillo lo hizo pasar de la derrota al triunfo parcial. Al cuarto de hora, Sergi Cardona levantó un centro y encontró el cabezazo del altísimo Thierno Barry para estampar el 2 a 2. Y, cuando iban 19, Nicolas Pepe bailó al fondo Celeste y lanzó un buscapié que Jailson lo metió en contra de su propia valla.

Los de Claudio Giráldez estaban cerca del nocáut, no reaccionaban y parecía que perdían el invicto en el Estadio de la Cerámica. Sin embargo, y en una jugada que reclamó todo el dueño de casa, vino el empate. Óscar Minguez pinchó un centro y Carl Starfelt de cabeza colocó cifras definitivas.

Durante el largo tiempo de descuento, los Celestes tuvieron tres ocasiones para ganarlo y sostener el puntaje ideal. El pleito estaba completamente roto hasta que, en la última, la visita regaló un penal que acertó Dani Parejo.

Celta de Vigo tuvo todo para quedar con 9 puntos de 9 posibles pero regresó a Galicia con las manos vacías de manera inesperada. En un verdadero partidazo, Villarreal le ganó 4 a 3 y trepó a los más alto de La Liga

Foto: Photo by Alex Caparros/Getty Images