Valverde pisa el freno con Adama | OneFootball

El lateral, que había disputado como titular tres de los primeros cuatro partidos ligueros del año, ha visto drásticamente reducidos sus minutos en el último mes y medio. Desde su titularidad contra el Girona el 8 de febrero, solo ha jugado un partido, como inicio, de los siete que ha disputado el equipo en ese tiempo

El fichaje de Adama Boiro por el Athletic es de aquellos que el aficionado no olvida.

No por la trascendencia del jugador en el momento de completarse o por el montante pagado, sino porque se anunció el pago de su cláusula de 2 millones a Osasuna durante el descanso del partido de cuartos de Copa del Rey contra el Barcelona, que a la postre se saldaría con victoria 4-2 para los de Valverde.

Adama, que hasta entonces militaba en el filial rojillo en 1a RFEF, pasó a jugar en el filial rojiblanco en 2a RFEF, la categoría inmediatamente inferior, aunque con la vista claramente puesta en ser jugador del primer equipo más pronto que tarde. Entre dirección deportiva y cuerpo técnico del primer equipo decidieron dar el paso y apostar por el lateral nacido en Dakar. Por ello, se tomó la decisión de traspasar a Imanol García de Albéniz, la otra joya en el carril izquierdo, al Sparta de Praga.

Hasta inicios de febrero, el minutaje de Adama Boiro era más que interesante, teniendo en cuenta que se trataba de su primera temporada en fútbol profesional. Había disputado como titular 10 de los 23 partidos de liga del Athletic, además de uno como suplente.

Además, fue protagonista en una de las mejores noches en la temporada, la goleada en casa en el partido de Europa League contra el Elfsborg, marcando el 1-0 en una jugada a balón parado y asistiendo a Gorka Guruzeta en el 3-0 en su primer y hasta ahora único partido europeo. Además, fue titular y cuajó un gran partido en la victoria liguera contra el Real Madrid en diciembre, la primera en casi 10 años.

Sin embargo, desde el partido contra el Girona, el jugador solo ha participado en un partido, el de liga contra el Mallorca en San Mamés, en el que se le vio dubitativo y poco preciso con balón. De hecho, una semana después, Valverde optó por Iñigo Lekue de inicio en el Sánchez Pizjuán como sustituto de Yuri, en busca de tener mayor oficio a la hora de frenar a un extremo tan potente como Dodi Lukebakio, fórmula que ya utilizara en el partido de liga del Villamarín, en este caso para frenar a un Antony entonces debutante con el Betis.

El lateral izquierdo (también, en menor medida, el derecho) lleva años siendo uno de los quebraderos de cabeza del club, ya que Yuri Berchiche, titular indiscutible como ‘3’, suma ya 35 años y Lezama lleva tiempo sin suministrar una alternativa de garantías . Esta circunstancia, sumada a la pérdida deportiva (en el lateral derecho) y extradeportiva (liderazgo en el vestuario) que sufrirá el Athletic con la retirada de Óscar de Marcos en verano, parecen acercar la renovación de un Iñigo Lekue que lleva ya años ejerciendo la función de parche de emergencia en ambos laterales.

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Parece claro que el míster extremeño, como acostumbra en casos así, busca tirar de prudencia y paciencia en la inclusión de Adama Boiro en el equipo, intentando evitar situaciones de riesgo que expongan al joven lateral. Entre todas las partes intentan evitar que se repita la dura situación que el año pasado acabó viviendo Imanol García de Albéniz, superado en muchos partidos y que vivió un importante ostracismo en el tramo principal de la temporada.

Una gestión, la que se está llevando a cabo con Adama, que busca emular las realizadas con Mikel Jauregizar o Peio Canales, priorizando no saltarse escalones y que el acople al equipo se produzca de manera óptima para que el Athletic pueda encontrar al añorado guardián de la banda izquierda de los próximos años.