Una joya en París, objetivo del nuevo Madrid | OneFootball

El relevo del centro del campo ya se busca en el mercado. Un jugador con visión, pegada y recorrido gusta mucho en las oficinas del Bernabéu. Su cláusula, el primer obstáculo a superar.

La salida de Luka Modric, leyenda absoluta del club blanco, deja un vacío imposible de llenar en términos emocionales. Pero en lo futbolístico, el Real Madrid ya se ha activado para encontrar un heredero que mantenga el nivel de excelencia en la medular. Entre los primeros nombres que han emergido en Valdebebas, uno destaca por encima del resto.

Vitinha, centrocampista portugués del Paris Saint-Germain, es una de las opciones que más gusta en los despachos del Bernabéu. A sus 25 años, atraviesa el mejor momento de su carrera. Esta temporada ha disputado 50 partidos, anotando 7 goles y repartiendo 2 asistencias, cifras que reflejan su impacto creciente bajo las órdenes de Luis Enrique.

Más allá de los números, lo que seduce al Real Madrid es su perfil: dinámico, cerebral, con capacidad para organizar, sacrificarse en defensa y romper líneas en conducción. Es justo el tipo de centrocampista moderno que encaja en el proyecto de Carlo Ancelotti, con la capacidad de dar continuidad al legado de grandes talentos en la sala de máquinas merengue.

Pero el fichaje no será un trámite. Vitinha tiene contrato con el PSG hasta 2029, y las relaciones institucionales entre ambos clubes no son las mejores. Se espera una negociación compleja, donde el club parisino exigirá una cifra elevada por un jugador que consideran pieza estructural de su nuevo proyecto.

A pesar de las dificultades, en Chamartín valoran seriamente su incorporación. No es el único nombre en la lista, pero sí uno de los que más consenso genera internamente. Su juventud, rendimiento actual y margen de crecimiento lo convierten en una oportunidad estratégica.

El relevo de Modric no será una copia. Pero si algo ha demostrado el club blanco, es que siempre encuentra formas de reinventarse sin perder grandeza. Y Vitinha, desde París, observa con atención el interés que llega desde la capital española.