Una idea tan atractiva como oscura | OneFootball

El fútbol regresó al Ramón Sánchez-Pizjuán y lo hizo con las mejores noticias para los intereses del Sevilla FC. Sin embargo, el estilo de juego de los de García Pimienta no terminó de convencer a los aficionados hispalenses, a pesar de que se vio favorecido por la expulsión de un jugador del Rayo Vallecano al final de la primera mitad. No obstante, esto pasa a un segundo plano al lograr, por fin, sumar los tres puntos después de dos derrotas consecutivas.

Los tres puntos, de lo poco positivo en el Sevilla FC

El Sevilla FC se marchó al último parón de selecciones de 2024 con muy malas noticias, siendo incapaces de vencer ni empatar tanto a la Real Sociedad como al CD Leganés. Por ello, sumar frente al Rayo Vallecano se convirtió en imprescindible para los de Nervión. Una vez lograda dicha victoria, el sabor de boca a nivel de resultados ha mejorado bastante, ya que deja atrás una dinámica bastante negativa de resultados y le permite situarse más cerca de los puestos europeos que de los de farolillos rojos. Además, anímicamente siempre es más fácil arreglar los errores desde una visión positiva y en la próxima jornada, de nuevo en el feudo hispalense, presentar una mejor cara frente a la afición sevillista.

En esta misma línea, los presentes en el Ramón Sánchez-Pizjuán salieron del estadio rojiblanco viendo el marcador como lo único resaltable de su equipo. El estilo volvió a ser muy pobre y plano, con llegadas propias de individuales más que de jugadas colectivas. El conjunto nervionense solo disparó a puerta en tres ocasiones, una cifra que pudo aumentar con bastante notoriedad si la capacidad de combinación fuese más dinámica entre los centrocampistas y atacantes sevillistas. El juego del Sevilla FC siempre pasa por las bandas, un aspecto en el cual tampoco estuvieron acertados los de García Pimienta, pues solo fueron efectivos dos de los 20 centros enviados al área rival.

Inferior por muchos momentos

Por otro lado, hay que destacar el conformismo y la pasividad mostrada durante la segunda mitad, pues, con un jugador menos, los vallecanos se mostraron superiores en varias zonas del campo. Además, crearon diferentes ocasiones, las cuales no terminaron rematando de la mejor manera, provocando pitos en las gradas del estadio nervionense y dejando en evidencia las dudas defensivas de algunos futbolistas.

Respecto a los aspectos positivos de la idea planteada, hay que quedarse con la quinta portería a cero en 14 jornadas de LaLiga. A pesar de las llegadas mencionadas con anterioridad, el equipo supo sufrir y en esos momentos de tensión supo mantener la sangre fría, aunque la falta de gol del Rayo Vallecano también puso de su parte.

Un canterano salva los muebles al Sevilla FC

Isaac Romero fue seleccionado por los aficionados como el mejor jugador del partido, en gran medida, por su lucha constante. Los goles no le están lloviendo al lebrijano, pero su pelea frente a las defensas rivales son incuestionables y frente al Rayo Vallecano le dejó bastante buenas noticias al Sevilla FC. De hecho, en la jugada del único gol del partido, él se encargó de regatear y cuerpear a los dos defensas visitantes para terminar mandando el balón hacia Djibril Sow, quien mandó el balón al fondo de la red. Este último tampoco estuvo muy desentonado durante el encuentro. El suizo fue eficaz en el 88% de sus pases y se encargó de decantar la balanza en un encuentro igualado.

Por otro lado, no hay que dejar de resaltar a Dodi Lukebakio. El extremo sevillista sigue siendo la principal baza en ataque del conjunto hispalense y la mayor parte de los acercamientos continúan pasando por las botas del belga.

Muchas dudas en la defensa contra el Sevilla FC

Sin desarrollar su peor partido, Kike Salas volvió a resaltar negativamente y no termina de convencer para consagrarse como la pareja de central de Loïc Badé. Contra el Rayo Vallecano, ganó cuatro de nueve duelos y llegó a perder la posesión en diez ocasiones. En la salida de balón en largo, tampoco dio su mejor versión. El canterano sevillista no acertó ninguno de los ocho toques realizados en este último aspecto. Sin embargo, no fue el único cuestionable de la zaga hispalense. Adrià Pedrosa solo venció una de sus seis disputadas y su aportación en ataque fue bastante nula. Además, en las acciones ofensivas que participó, tampoco aportó nada positivo. También falló los cuatro centros que envió hacia el área y perdió la posesión en 15 ocasiones.