Un comodín llamado Beñat Prados | OneFootball

El centrocampista de Iruñea disputó buena parte del encuentro frente al Getafe como defensa ante la cartulina roja a Yeray, pero no es la primera vez que adopta posiciones defensivas

Resulta inverosímil, al ver jugar a Beñat Prados, que esta sea su primera temporada en la élite. El centrocampista procedente de la Txantrea ha caído de pie en el conjunto dirigido por Ernesto Valverde y, con el encuentro de ayer frente al Getafe, ya suma 30 apariciones en partidos oficiales este curso (23 en Liga y 7 en Copa). Desde su llegada al primer equipo, Prados se ha hecho dueño y señor del centro campo, formando una preciosa pareja de baile con el experimentado Iñigo Ruiz de Galarreta, quien se perdió la visita a la capital por una lesión.

Si bien es cierto que el Athletic salió del Coliseum con los tres puntos bajo el brazo, le tocó sufrir para mantener el resultado tras la expulsión de Yeray, primero, y Paredes, después. Sin centrales en el banquillo, Valverde apostó por Beñat Prados para ocupar el lugar del ‘5’, y acompañar a Paredes en el eje de la zaga hasta que Gil Manzano le enseñase la cartulina roja en el minuto 72.

El centro de la zaga: Una posición frecuente

No es extraño para Beñat Prados jugar en posiciones defensivas. En su etapa en Mirandés, el navarro disputó una buena cantidad de partidos como defensa central, cuando Joseba Etxeberria apostó por una defensa de tres, siendo Prados el más liberado. En el Athletic, también disputó algunos minutos como defensa central en esta pretemporada contra la SD Eibar, junto a Nolaskoain, en un partido que acabó con empate a uno.

Beñat Prados disputa un balón contra Muriqi en la final de la Copa del Rey, disputada el pasado 6 de abril en el estadio La Cartuja, Sevilla || Getty Images

En el transcurso de esta temporada, ya aposentado en el primer equipo, también ha disputado, aunque de manera puntual, algunos minutos en el lateral derecho. El primer encuentro con la camiseta del Athletic (frente al CA Osasuna en El Sadar) sustituyó a Imanol y jugó seis minutos -sus primeros seis minutos con el equipo- como lateral.

Su mayor exhibición en esa posición fue, quizás, frente al FC Barcelona en San Mamés, donde jugó 80 minutos y consiguió neutralizar de manera sobresaliente el ataque azulgrana. La última vez que Valverde recurrió a la polivalencia del navarro fue en la visita del Athletic al Cívitas Metropolitano, donde Prados tomó el relevo de Yeray, que cubría la ausencia de Óscar De Marcos.