Últimos 9 partidos de Atlético Nacional en condición de visitante | OneFootball

Parce, esto hay que decirlo sin pelos en la lengua: en los últimos 9 partidos por fuera del Atanasio, el Verde ha estado más perdido que aguacate en cevichería. Perdimos 6 de esos juegos contra Bucaramanga, Internacional, Cali, Bahía, Águilas y Nacional de Uruguay. ¡Seis derrotas, hermano! Eso no es cualquier cosita, eso es para sentarse y pensar seriamente qué nos está pasando cuando salimos de Medellín.

¿Y los otros tres partidos? Pues tampoco ganamos, parce. Fueron empates con Envigado, Millonarios y Medellín. Tres igualdades que dejaron sabor a poquito, porque en varios de esos partidos tuvimos cómo apretar más, pero algo nos sigue faltando. No estamos siendo ese Nacional bravo, copero y ganador que impone respeto en cualquier cancha.

Nos duele decirlo, pero hay que hacerlo con amor y responsabilidad: estos datos son muy preocupantes para el combo verdolaga. No es solo perder, es cómo se está perdiendo. A veces sin alma, a veces sin reacción, a veces con errores infantiles que no pueden pasar en un equipo con esta historia. Y todo esto, justo antes de que arranquen los cuadrangulares semifinales. ¡Pilas, profe Gandolfi!

Parce, ya viene lo serio, lo bravo, lo que separa a los buenos de los grandes: los cuadrangulares no perdonan, y en la Copa Libertadores nos espera un octavos de final que exige estar finos, concentrados y con el carácter bien puesto. No podemos seguir regalando puntos ni jugando con ese susto de visitante. Hay que recuperar la jerarquía y ese ADN copero que nos hizo grandes.

Esto no es para tirar la toalla, ni para dejar de alentar, pero sí para abrir los ojos y prender las alarmas. Porque el que no reconoce sus errores, los repite. Nacional no puede ser un equipo fuerte solo en el Atanasio. ¡Tenemos que volver a ser ese visitante incómodo, el que te gana con autoridad en cualquier cancha de Colombia o Sudamérica!

Se viene un momento decisivo, y la hinchada está firme, como siempre: alentando, creyendo y metiendo energía. Pero también exigiendo, porque amamos esta camiseta y queremos verla levantar trofeos, no coleccionar excusas. Sabemos que hay talento, pero hay que ponerle actitud, identidad y corazón. ¡Vamos, muchachos, que esto todavía se puede enderezar!

Verdolaga que se respeta no abandona, pero sí señala lo que está mal para que se corrija. Estamos contigo, profe Gandolfi, pero necesitamos que el equipo vuelva a dar miedo, a marcar territorio. ¡Es hora de reaccionar, parceros! Porque en Nacional no hay espacio para la mediocridad. ¡Vamos con toda que la historia nos exige grandeza!