Tchouaméni, un crack destinado al éxito: dieta estricta, partidos repetidos y obsesionado con el aprendizaje | OneFootball

Su padre le enseñó que el respeto, la humildad y la ambición son aspectos fundamentales en la vida. Él comenzó como farmacéutico y años más tarde consiguió dirigir un laboratorio de vacunas. Todo gracias al trabajo, la incansable búsqueda del éxito y el amor por la profesión.

Clave en la evolución académica ha sido su madre, que ejerce en la educación pública y ha estado siempre muy pendiente de Aurélien. En su casa siempre se repetía lo mismo: "Primero los estudios y después el fútbol". Algunos entrenadores, como Gustavo Poyet, quedaron sorprendidos con su implicación en este sentido.

"Cuando estábamos en Burdeos él todavía estaba estudiando. Siempre fue muy educado. Tuvo unos exámenes y no venía con nosotros porque quería estudiar", explicó en Goal. Tras acabar la educación obligatoria y debutar oficialmente a los 18 años, Tchouaméni pudo ya centrarse al cien por cien en el fútbol.

Destinado a lo más alto

Se trata de un jugador por encima de la media en cuanto a formación académica. Dejó a todos impresionados en su presentación con el Real Madrid pronunciando un discurso en español, dispuesto a aprender el idioma lo antes posible, y asumiendo el reto que significa jugar en el mejor equipo de la historia.

Tchouaméni es un amante de la cultura americana. "He fallado una y otra vez en mi vida, por eso he tenido éxito". Sigue una dieta estricta, entrena en ayunas, ve sus partidos repetidos para corregir errores, pregunta a los veteranos... Y todo con un objetivo: "Quiero dejar mi huella en el fútbol y el Real Madrid es el mejor club del mundo para eso".