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·14 de enero de 2025

Supercopa de España 2025: Arabia ofrece otro Clásico para recordar

Imagen del artículo:Supercopa de España 2025: Arabia ofrece otro Clásico para recordar

El escenario estaba preparado para otro espectacular Clásico en Arabia Saudita incluso antes de que se pateara el balón en la final de la Supercopa de España 2025 el domingo.

Un deslumbrante espectáculo previo al partido, que incluía fuegos artificiales, luces coreografiadas y una exhibición de drones proyectando los logotipos de Real Madrid y Barcelona en el cielo nocturno sobre la Ciudad Deportiva Rey Abdullah, marcó un impresionante hito. La multitud dentro del estadio de Jeddah, con capacidad para 60,000 personas, ya había alcanzado un punto de ebullición, con un ruido penetrante y ensordecedor.


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Todo lo que se necesitaba era un buen partido de fútbol, y vaya que lo ofreció. Arabia Saudita ha creado una bienvenida costumbre de organizar memorables Clásicos desde que asumió las funciones de anfitrión de la Supercopa en 2020, pero incluso por los altos estándares previos del Reino, esto fue algo más.

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Barcelona tomó el control inmediato desde el inicio, con la sensación adolescente Lamine Yamal en particular mostrando su deseo de causar estragos en sus archirrivales. Los catalanes podrían haber estado 2-0 arriba en los primeros minutos, la paridad solo mantenida gracias a dos grandes paradas del muro del Real Madrid, Thibaut Courtois.

Sin embargo, fue Madrid quien golpeó primero, un contraataque relámpago terminó con Kylian Mbappé disparando un remate característico. Desde un córner de Barcelona, tomó menos de 10 segundos para que el delantero francés abriera el marcador y enviara a los aficionados del Madrid a la locura.

Con solo cinco minutos en el reloj, se había acumulado más acción que en muchos partidos regulares. Fue un juego vertiginoso y sin tregua; fue lo que hemos llegado a esperar de El Clásico, la rivalidad futbolística más famosa del mundo que había visto 21 goles anotados en los cinco encuentros anteriores.

Con una ventaja en contra del juego (si tal término puede usarse después de solo cinco minutos), el Real Madrid se había preparado para tomar una medida de venganza por la paliza de 4-0 que sufrió ante el Barça en LaLiga hace menos de tres meses.

Sin embargo, Barcelona tenía otras ideas, y su constante presión pronto dio frutos cuando Yamal empató con un remate bien colocado 17 minutos después. Se abrieron las compuertas cuando un penalti de Robert Lewandowski, un cabezazo de Raphinha tras un delicioso centro profundo de Jules Koundé, y un gol de Alejandro Baldé en el tiempo de descuento de la primera mitad enviaron al Barça al descanso liderando 4-1 y dejando al Real Madrid tambaleándose.

Tan brillante como fue Barcelona, el Real estaba a la deriva, la falta de cohesión que les costó tan caro ante sus rivales en octubre volvió a aparecer en Jeddah.

Una vez que Raphinha anotó su segundo gol poco después del intervalo, cualquier posibilidad de una improbable remontada del Madrid se extinguió. Incluso una tarjeta roja para el portero del Barça, Wojciech Szczesny, y un segundo gol del Real Madrid de Rodrygo unos minutos después en la marca de la hora no alteraron el resultado más allá de lo que este juego merecía: una victoria arrolladora del Barcelona.

Después de perder cuatro Clásicos consecutivos, el Barça ha ganado ahora los últimos dos por un marcador global de 9-2, mientras que ha ganado la Supercopa por un récord de 15 veces, manteniendo al Real Madrid, que se queda en 13, a distancia.

Fue un final apropiado para un espectacular festival de fútbol que atrajo asistencias récord, tanto para la final del domingo como en total a lo largo de los tres partidos, desde que la Supercopa de España se trasladó a Arabia Saudita en 2020.

La final contó con una multitud de 56,818 personas de 135 países diferentes, con 3,693 mujeres presentes. La primera semifinal entre Barcelona y Mallorca atrajo a 36,342 aficionados de 107 países, incluidos 2,544 mujeres, mientras que la segunda semifinal que involucró a Real Madrid y Mallorca vio una multitud de 47,045 aficionados de 122 países, de los cuales 4,234 eran mujeres. En total, la Supercopa de España recibió a 140,205 aficionados a través de las puertas, incluidos 10,471 mujeres.

Por cuarto año consecutivo, Arabia Saudita fue testigo de un Clásico digno de la reputación de la rivalidad. En 2022, el Real Madrid superó al Barcelona 3-2 tras la prórroga en las semifinales; en 2023, el Barcelona levantó el trofeo con una victoria de 3-0, y el año pasado un hat-trick de Vinicius Junior llevó al Real al título. Pocos dudarían que el enfrentamiento de 2025 superó a todos.

A medida que Barcelona y Real Madrid regresan a España para reanudar sus deberes domésticos, la cuenta regresiva ya ha comenzado hasta que estos dos grandes clubes regresen a Arabia Saudita para su próximo duelo en el desierto.


📸 HAITHAM AL-SHUKAIRI - AFP or Licensors