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·4 de diciembre de 2024
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La decisión de los jugadores del Manchester United de no vestir una cinta y una chaqueta en apoyo a la comunidad LGTB ha generado un intenso debate en el mundo del fútbol.
La campaña «Rainbow Laces», impulsada por Adidas y la Premier League, busca visibilizar y apoyar al colectivo LGTB en el fútbol. Sin embargo, esta iniciativa ha chocado con las creencias religiosas de algunos jugadores, como Mazraoui, quien argumentó que su fe le impedía llevar el distintivo y que fue apoyado por sus compañeros.
Ahora, la negativa de los jugadores del Manchester United ha tenido varias consecuencias. Por un lado, ha generado una gran polémica en las redes sociales y en los medios de comunicación, dividiendo a los aficionados y a los expertos. Por otro lado, ha puesto en evidencia las tensiones del fútbol con los nuevos movimientos sociales.
Además, la decisión de los jugadores ha tenido repercusiones económicas. El Manchester United tiene un acuerdo millonario con Adidas, y la marca deportiva se ha mostrado «decepcionada» con la actitud de los futbolistas, conforme a Mundo Deportivo.
La postura del Manchester United
El club ha intentado mantener una posición neutral en este asunto. Por un lado, ha reafirmado su compromiso con la diversidad y la inclusión, pero por otro lado, ha reconocido el derecho de los jugadores a expresar sus opiniones personales.