Si Neymar se queda en el PSG será con condiciones… | OneFootball

Las últimas informaciones apuntan a que Neymar finalmente se quedará en el Paris Saint-Germain. El Barcelona no podría satisfacer las necesidades económicas del equipo parisino, y por tanto, el brasileño ya habría aceptado esta dura situación. Incluso se había hablado de que el delantero iba a poner 20 millones de su propio bolsillo para salir del campeón de Francia. Salvo cambio de última hora, el jugador tendrá que estar en París al menos hasta el próximo mercado de fichajes.

Con Neymar en el PSG, Al-Khelaïfi y Leonardo tendrán que hacer frente a un futbolista que no quiere jugar en su equipo. Una situación que ya ocurrió con Adrien Rabiot, que estuvo apartado del equipo por negarse a renovar con el conjunto capitalino. No obstante, no se puede comparar al galo con el ex del Barcelona. Básicamente, porque Neymar costó 222 millones de euros, y todavía le quedan varios años de contrato. El delantero es un estrella, y va a ser más difícil que Thomas Tuchel no cuente con un jugador que hace falta, sobre todo, en competiciones europeas. Aún así, el técnico alemán tendrá que recibir órdenes desde arriba, y actuar en consecuencia.

El director deportivo Leonardo se prepara para tener una conversación a fondo con su compatriota. Hacerle entrar en razón, y hacerle feliz en París de una manera u otra. Tendrá que levantar la mano en cuestión de prohibiciones para que el jugador vuelva a sentirse querido y tenga ganas de ayudar a su equipo a ganar. Nadie ha dudado de la profesionalidad de Neymar, pero debe ser complicado estar en un equipo en el que no quieres estar, y además, tras haberlo manifestado. El presidente Nasser Al-Khelaifi hizo regresar a Leonardo para que pusiera orden en el vestuario parisino y a sus estrellas. Tal fue así, que se realizó un documento donde se comunicaban las prohibiciones y los nuevos cambios que iban a acontecer con el brasileño al mando.

Con tanto lesionado, el delantero es necesario para el equipo. La directiva lo sabe, y a priori, no van a llegar refuerzos, por lo que lo más económico será convencer al jugador de que continúe una temporada más. Los compañeros del futbolista serán los encargados de hacerle sentir querido y que se olvide toda esta pesadilla. Algo parecido ya pasó con Marco Verratti hace un par de temporadas cuando el italiano también quería irse al Barcelona.

Si Neymar se queda, directiva, entrenadores y jugadores, tendrán que volver a pensar que cuentan con una estrella con «falta de cariño».