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·21 de octubre de 2020
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El Sevilla logró este martes un valioso punto en Stamford Bridge que llegó a saber hasta a poco. Sin llegar a avasallar a su rival, el equipo de Julen Lopetegui dominó el partido ante el Chelsea y tuvo más ocasiones que el equipo de Frank Lampard, que tras un inversión millonaria dio por bueno el empate en casa ante su gran rival en el grupo E.
Los de Nervión volvieron a presentarse en el gran escenario europeo con mucha personalidad y yendo a por el partido, queriendo mandar y sacando el máximo partido de sus armas: la solidez defensiva, el control de la posesión cuando el partido lo requiere y de la velocidad cuando intenta hacer daño. Una vez más le faltó algún aliciente ofensivo más para dar un zarpazo definitivo pero se puede decir que el Sevilla es uno de los equipos más difíciles de batir en el continente.
La grada del Sánchez-Pizjuán solía cantar "Y no pueden con él" al recordado José Antonio Reyes. Un cántico que hacía referencia a lo difícil que era parar al utrerano cuando se ponía a regatear y esa canción define a la perfección al rocoso equipo que ha cincelado Julen Lopetegui y que sigue rindiendo a gran nivel a pesar de las salidas de Banega y Reguilón. De hecho, sus sustitutos Rakitic y Acuña cuajaron en Stamford Bridge sus mejores minutos en lo que va de temporada.
Tumbar al Sevilla se ha convertido en una tarea casi faraónica. Sólo Real Madrid, Celta y Granada en LaLiga y Mirandés en la Copa del Rey han hecho morder el polvo al Sevilla en todo 2020 tras 90 minutos. Desde que el fútbol se reanudó tras el coronavirus, sólo el Bayern de Múnich en la final de la Supercopa de Europa pero necesitando la prórroga y el Granada, que jugó toda la segunda parte con uno má el pasado sábado, han hecho morder el polvo a los sevillistas.
En este periodo, el Sevilla se ha medido dos veces al Barcelona en LaLiga tanto en el Sánchez-Pizjuán (0-0) y como en el Camp Nou (1-1), también visitó al Villarreal (2-2), al Athletic Club (1-2) o la Real Sociedad (0-0). En la Europa League derrotó a Roma (2-0), Wolves (1-0), Manchester United (2-1) e Inter (3-2) y los 90 minutos de la final ante el Bayern de Múnich acabaron con 1-1. El Chelsea tras invertir más de 200 millones de euros tampoco pudo con el Sevilla, que sigue presentando credenciales para vivir otra temporada de éxitos.