Seria posibilidad para que Nacional pierda a Billy Arce en finales | OneFootball

¡Parceros verdolagas! Les tengo un chisme bueno, bueno, de esos que uno no sabe si celebrar con todo el alma o agarrarse la cabeza con las dos manos. Resulta que Billy Arce, sí, ese mismo que viene prendido como veladora en diciembre, está siendo seguido muy de cerquita por el cuerpo técnico de la Selección de Ecuador. ¡Ojo! Que no es cualquier rumor, parce, los manes lo tienen en la mira para las Eliminatorias del Mundial que se juegan en junio.

Ahora, pongámonos serios un momentico. Si lo convocan y todo pinta que sí, Billy se perdería los primeros partidos de Nacional en los cuadrangulares. ¡Qué baja tan brava, ome! Porque el hombre ya se ganó su puesto con toda en el equipo de Javier Gandolfi, y no es cualquier pieza: es clave, es desequilibrante, es pura candela por la banda.

Y es que el Billy no vino a Medellín a pasar vacaciones, vino a romperla. Ya se metió en el corazón de la hinchada, se conecta bien con los parceros del mediocampo, y cuando arranca, pareciera que tuviera cohetes en los pies. Así que sí, nos alegra que lo estén viendo a nivel de Selección, pero también nos deja con esa espinita, parce… ¿Cómo vamos a arrancar los cuadrangulares sin él?

Pero a ver, seamos claros: que lo llamen a la Tri es una bendición para él y un orgullo para el club. Que un jugador de Nacional esté peleando un cupo para el Mundial es señal de que las cosas se están haciendo bien. ¡Eso también habla del trabajo de Gandolfi y todo el combo técnico, parce!

Ahora, desde la tribuna, desde el alma verdolaga, solo queda desearle lo mejor. Que si le llega la convocatoria, que la rompa con Ecuador. ¡Y que deje claro que en Nacional se forman cracks de Selección! Pero eso sí, que no se nos olvide volver, Billy, que aquí te necesitamos como el guaro en diciembre.

Mientras tanto, el profe Gandolfi va a tener que mover las fichas, porque esto no se detiene, parceros. Se vienen partidos durísimos, y cada punto va a costar como el oro. Pero si algo nos ha enseñado esta camiseta, es que cuando uno cae, otro se levanta con más fuerza. ¡Aquí nadie se rinde, parce!

Así que vamos a estar pendientes, conectados, alentando desde donde sea. Porque Nacional no es solo once jugadores: Nacional somos todos. ¡Y si a Billy le toca ir a buscar la gloria mundialista, nosotros aquí le guardamos el lugar y le mandamos toda la buena vibra, parce!