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·30 de octubre de 2019
Ser primero: sinónimo de título para Atlético Nacional

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·30 de octubre de 2019
“Da lo mismo clasificar primero que octavo” es una de las frases más recurrentes en el fútbol colombiano cuando se acerca la hora de definir los ocho equipos participantes de los Cuadrangulares o semifinales del campeonato.
Y es cierto dado que la posición en la tabla no representa ventaja o desventaja alguna a la luz del reglamento y un equipo que clasifique raspando en la última fecha puede imponerse o el que cabalgó todo el torneo, desplomarse sin más.
En la Liga Águila del segundo semestre, Atlético Nacional cerró como primero luego de 20 fechas, liderato que asumió en la recta final del campeonato aprovechando la caída de Alianza Petrolera quien estuvo en esa posición gran parte del torneo. Pero para los Verdes, ser primero significa un poco más.
En torneos cortos, el Verdolaga ajustó su novena vez llegando al Cuadrangular como líder y en seis de ellas, terminó la campaña levantando el título de campeón. Un dato para alimentar la cábala y, por qué no, levantar la producción del equipo que no ha sido constante desde la fecha 10 en adelante. Y dos de esas seis veces fueron con Juan Carlos Osorio, además.
Nacional fue líder y posteriormente campeón en 2005-I, 2007-II, 2013-II, 2014-I, 2015-II y 2017-I. En el segundo semestre del 2016 resignó sus aspiraciones por meterse de lleno en el Mundial de Clubes, situación que lo llevó a terminar el campeonato con su equipo sub 20 siendo semifinalista, mientras que en el primer semestre del 2018 llegó hasta la final, pero cayó ante Tolima.
Será la cuarta vez de Osorio en Cuadrangulares con Nacional, donde muestra un rendimiento del 50%. En 2012-II quedó eliminado de la final por el Medellín, de manera agónica en la última fecha, pero tuvo su revancha en los dos semestres del 2013 siendo campeón ante Santa Fe y Deportivo Cali. Volvió a caer en el Cuadrangular del 2014-II, siendo tercero del grupo, afectado en parte por disputar paralelamente la Copa Sudamericana.
Ahora tanto Osorio como el equipo tiene el reto de revalidar, no solo la estadística favorable, sino también el manto de favorito -sin el peso de otros años- con el que llega a la definición del título para asegurar la estrella 17 y el cupo a la Copa Libertadores 2020. ¿Repetirá?