Se cumplen 35 años del fichaje de Laurie Cunningham por el Rayo Vallecano | OneFootball

Este mes de julio se cumplen 35 años del ‘mediático’ fichaje de Laurie Cunningham por el Rayo Vallecano. El futbolista inglés, que más tarde se convertiría en un símbolo de lucha contra el rascismo, llegó a Vallecas en el verano de 1986.

El extremo llegó a Vallecas con 30 años y tras vivir las experiencias en Real Madrid y Sporting de Gijón en el fútbol español. El futbolista, con ofertas del Hércules y otras en el extranjero, decidió volver a la ciudad de Madrid.

Llegó a un Rayo Vallecano que sumaba un año en Segunda División tras venir de Segunda B. La temporada anterior (85-86) los franjirrojos se salvaron por poco y el objetivo era asentarse en la categoría de plata.

Era un Rayo entrenado por Héctor Nuñez en su segunda etapa que se reforzaba con el inglés así como García Navajas (ex del Real que llegaba del Valladolid) así como el uruguayo Belza. La gran estrella era el veterano Rubén Cano quien había anotado 16 goles la temporada pasada. La 86-87 sería el año de consagración del canterano Javi Rey quien con 18 años sumó más de 40 partidos con la Franja.

Cunningham jugó un total de 37 partidos aquella temporada anotando tres goles con el equipo vallecano. Una temporada que hizo acabar al Rayo en mitad de tabla de la clasificación.

Tras medio año en la Jupiler League (en el Charleroi) y otro medio en el Wimbledon FC, el extremo regresó al Rayo Vallecano en el verano de 1989. Aquel año su papel fue menor y las lesiones que siempre le acompañaron al inglés lastraron al futbolista. Pero dicha temporada, con los Hugo Maradona, Sánchez Candil, Botella… el futbolista vivió un ascenso a Primera con el equipo vallecano.

Cunningham, de 33 años, negociaba en el verano del 89 su continuidad en Vallecas donde se encontraba muy cómodo. Pero un 15 de julio de 1989 el extremo fallecía como consecuencia de un accidente de tráfico en la ciudad madrileña. Una gran conmoción en el mundo del fútbol.

Años después el Rayo Vallecano, a través de su afición, rescataría la figura de Cunningham en la lucha por el racismo. El inglés en su día fue uno de los primeros jugadores negros en vestir la camiseta de Inglaterra.