Scottie Scheffler consigue su segunda chaqueta verde | OneFootball

El americano Scheffler cumplió con su papel de favorito y se alza con el título de campeón del Masters de Augusta

El Masters de Augusta de 2024 ya tiene ganador. De las manos de Rahm se volvió a poner la chaqueta verde. La segunda vez que lo hacía, la primera fue en el 2022. El número uno del mundo acabó el torneo con un resultado de once bajo par con cuatro golpes de ventaja sobre el sueco Aberg. Se mantuvo firme durante todo el domingo. Solo tenía un golpe de ventaja frente a su compatriota Morikawa. No le hizo frente. El búnker del 9 y el arroyo del 11 le privaron de seguir a Scheffler en la cabeza de la tabla.

Fue el joven sueco Aberg el que mayor pelea dio a Scheffler. Con 24 añitos dio guerra hasta casi el final. Los nueve primeros hoyos del domingo hicieron creer a la gente que podía darse un gran asalto al liderato de Scheffler, pero se topó con el arroyo del 11 y su sueño se fue por la borda. Para ser el primer año como profesional, Aberg dejó buenas sensaciones y un golf prometedor para el futuro.

Un torneo de maestro

Scottie Scheffler demostró porque es el top 1 mundial. Jugó un golf sólido en las primeras jornadas a pesar de las dificultades del aire y los green blandos por la lluvia que le permitió mantenerse cerca de la cabeza aunque no lideró. Con ese swing tan peculiar que tiene el americano, bailando con los pies el sábado se hizo grande en el 13 haciendo un eagle y solo se vio en apuros en la jornada final. Dos bogeys acercaban a Morikawa y a Aberg al liderato, pero Scottie se rehizo muy bien y sacó tres birdies en los par 5 de Augusta para poner el broche final a un gran torneo.

El amargo regreso de Jon Rahm

El de Barrica volvía a verse las caras con sus ex-compañeros de circuito y no le fue muy bien. En términos de Golf, Jon firmó su peor actuación en ocho actuaciones. Con 297 golpes y cuatro sobre par no tuvo una buena defensa de la chaqueta del 2023. Empatado con leyendas como Olazábal, no recordará con cariño este Augusta 2024. En lo personal, tampoco fue un reencuentro idílico. Se volvía a ver las caras con sus compañeros de la PGA; «Sí, era algo que esperaba. También lo contrario, alguno que pensaba que iba a estar muy seco y me dio un abrazo. Los que son mis amigos siguen siendo mis amigos y los que no lo eran, pues ya se sabe. Sabía que iba a pasar, sólo me faltaba saber quién».