River demolió a Barracas Central y acumuló su tercer éxito en fila | OneFootball

En el Mâs Monumental le llevó un tiempito al Millonario doblegar al Guapo pero a pura contundencia (Meza, uno y medio de Miguel Borja mas Paulo Díaz) se impuso y no se baja de la pelea por la Liga Profesional. Los de Insua atraviesan un muy preocupante presente en el último puesto.

El choque comenzó con la amenaza de lluvia que pronto se fue cristalizando con el correr de la tarde algo calurosa en Núñez. River salió en búsqueda de continuar su racha pero los primeros 45 ante Barracas estuvieron lejos de lo buscado por Gallardo porque su equipo acumuló altos niveles de posesión como cierta intrascendencia a la hora de profundizar para enfrentar esa línea de cinco visitante. Facundo Colidio tuvo una que Miño salvó con un manotazo milagroso y fue de las pocas veces que pudo tener una chance de peligro como también en ese cabezazo de Echeverri tras disparo de Solari.

River manejó la pelota pero le costó el volumen de juego ante los barraqueños que lucharon los distintos sectores pero que mostró un alarmante escaso peso para manejar la pelota o conectar pases. Bruera luchó bien ante los zagueros e Iván Tapia logró algunas faltas para que su equipo repose. Poco y nada pasó en un primer tiempo que despidió con una fuerte lluvia.

El Gallego rearmó su equipo con dos variantes y continuó con su plan original de pelear la pelota pero sin romper su eje defensivo. El Diablito tuvo una buena que tiró alta en un encuentro donde River no podía. Borja, Pity Martínez y Mastantuono fueron las caras para torcer una llovida tarde. El local encontró alivio con ese centro y cabezazo de Maximiliano Meza para quebrar la paridad en el encuentro que se tornaba molesto e incómodo para River que ahí sabía que tenía una buena puerta para cerrar y fue Miguel Borja que le puso también la cabeza para la tranquilidad a las 30 minutos del complemento.

Para colmo de males es que la visita se quedó con uno menos tras la segunda amarilla a Nicolás Demartini y debió lidiar el final con diez jugadores ante la supremacia de River que hizo correr la pelota y el reloj para asegurar una victoria más en casa. El Colibrí pareció vivir una noche de redención personal ya que también marcaría el tercero a los 37 del segundo tiempo ante un Barracas que padeció la ira ofensiva local. Sin embargo, el mismo, sería anulado por offside. Paulo Díaz se anotó en la goleada con un disparo que encontró una pésima respuesta de Miño en un cierre a puro grito.