Racing ganó un partido de campeón ante Central | OneFootball

Llorá y emocionate hincha de Racing porque el de hoy contra Rosario Central no te lo olvidás más. Dejá caer tus lágrimas que motivos te sobran. Gritá bien fuerte, hasta que te quedes sin vos. ¡Vamos Academia carajo!. Se ganó, se ganó a lo campeón. Con sangre, con huevos, con mucho carácter y con futbol. Cuando ahí se iban las chances de la Liga Profesional, apareció el equipo. El de los milagros, el que sueña en grande, el que hizo retumbar el Cilindro con un 4-3 inolvidable.

Con la necesidad para quedarse a tiro de la punta, Racing recibió a Rosario Central en un Cilindro colmado. A pesar de las bajas que presentaba el equipo de Carlos Tevez, en Avellaneda había cierta incertidumbre desde bien temprano. Fernando Gago había decidido prescindir de Vecchio entre los titulares y perdido a Copetti por un cuadro de gastroenteritis. ¿Cómo iba a responder Racing contra Central sin sus dos principales armas ofensivas? Era todo un desafío para la Academia sacarse de encima a los rosarinos y llegar al cuarto triunfo consecutivo. Y fue un partido increíble. Loco, indescifrable. Extraño. Fue un Racing de los milagros, un partido de campeonato.

Las dos caras de Racing ante Central

En el primer tiempo, el funcionamiento defensivo de Racing fue subterráneo y Central lo aprovechó. Ni siquiera el gol de carambola de Alcaraz levantó a un equipo que jugó lento y muy poca intensidad. Así, Central jugó replegado y esperó el adelantamiento del local para hacer daño. Aprovechando un nivel bajísimo de Mura, Sigali, Insúa y Moreno, los de Tevez tuvieron tiempo para jugar, pensar y definir. Almada, Buonanotte y Véliz, entre los 19 y 34 minutos, le hicieron tres a un Arias que no pudo hacer. La desilusión, una vez más, inundó a un Cilindro que esperaba, como Gago, a un Racing protagonista ante Central.

Racing contra Central y un partido inolvidable.

Ya en el segundo tiempo, Fernando Gago no esperó e hizo tres cambios. Vecchio, Carbonero y Cáceres ingresaron por Gómez, Hauche y Mura, tres de los peores de la cancha. Los cambios le hicieron bárbaro a Racing contra Central, porque ingresaron jugadores que venían en buen nivel y le dieron vuelta la cara a la Academia. A puro fútbol y carácter, Vecchio se hizo dueño del equipo. Hizo el gol del 2-3 y asistió a Romero para el 3-3. Fue todo de Racing, que en la segunda parte borró de la cancha y debió como jugar un partido clave como el del viernes por la noche. Y llegó al milagro, sobre la hora Moreno puso un cabezazo para el delirio de todo el Cilindro.

Un triunfo que no va a ser fácil olvidar, que quedará en la retina de todos. Ese que te hizo llorar y emocionar. El que te volvió a dar esperanzas, el que demuestra que estamos más vivos que nunca. Un triunfo de Racing a lo campeón ante Central. Ahora a seguir soñando, la presión la tienen los otros. Gago y sus jugadores demostraron que los tienen muy bien puestos.