90min
·4 de abril de 2024
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·4 de abril de 2024
El fútbol no deja de sorprendernos y la jornada 31 de la Premier League nos ha regalado un auténtico espectáculo de gran disfrute para el espectador. Chelsea y Manchester United se enfrentaban en Stamford Bridge con la necesidad de ambos equipos de conseguir una victoria que les mantenga en la lucha por sus objetivos, tras una temporada de luces y sombra.
Lo cierto es que el encuentro no ha defraudado y ha cumplido con todas las expectativas. El choque comenzaba con dos goles del conjunto de Pochettino en pocos minutos, anotados por Gallaguer y Palmer. Parecía que el encuentro se inclinaba para los blues, pero los de Ten Hag conseguían empatar antes del descanso con tantos de Garnacho y Bruno Fernandes. A la vuelta de vestuarios, los red devils se ponían por delante con un doblete de Garnacho, consumando así una gran remontada. Cuando todo hacía indicar que el partido caería para los de Old Trafford, un penalti transformado por Palmer de nuevo daba el empate al Chelsea en el minuto 98. Finalmente, la locura se apoderaba de Stamford Bridge, y Palmer culminaba una noche para el recuerdo con un hat trick en el minuto 100 de partido. Una auténtica locura que aleja al Manchester United de sus opciones de clasificarse para la Europa League de la próxima temporada.
Debemos partir de la base de que, la regla inicial es que para la Europa League consiguen billete el quinto clasificado de la Premier League y el ganador de la FA Cup. Actualmente, el conjunto de Ten Hag es sexto en la tabla, y esta derrota le distancia en nueve puntos del Tottenham, que es quinto clasificado. A partir de aquí, hay dos vías principales que parecen más posibles para que el Manchester United pueda lograr disputar la próxima Europa League:
Chelsea FC v Manchester United - Premier League / Robin Jones/GettyImages
Está claro que la derrota sufrida en el encuentro ante el Chelsea dificulta mucho las opciones del Manchester United de clasificarse para la Europa League. No obstante, todavía existe la posibilidad, y mientras exista el conjunto de Ten Hag debe luchar cada partido como si fuese el último, fiel a la grandeza histórica del equipo de Manchester.