¿Qué dice el Big Data sobre Erik Lamela? | OneFootball

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·26 de julio de 2021

¿Qué dice el Big Data sobre Erik Lamela?

Imagen del artículo:¿Qué dice el Big Data sobre Erik Lamela?

Erik Lamela se ha convertido en el segundo fichaje del Sevilla FC de esta temporada 21/22. El extremo argentino, que vestirá las próximas tres temporadas la elástica nervionense, es uno de esos futbolistas que Monchi no habría podido fichar nunca en el mejor momento de su carrera por el enorme talento que ha demostrado en sus estancias en River, Roma y, en algunos momentos, en el Tottenham. El director deportivo sevillista es experto en encontrar en el mercado a futbolistas de este corte, esos que no están pasando por su mejor momento y que necesitan de un contexto muy favorable para dar el mejor rendimiento posible.

El principal problema del ex de los Spurs ha sido, sin ningún tipo de duda, el apartado físico. Las lesiones han limitado al de Carapachay de levantar a los aficionados desde el extremo diestro. Su espectacular rendimiento en Roma hizo que el club que preside Daniel Levy pagara 30 millones de euros tras disputar tan sólo dos temporadas en Europa esperando un rendimiento similar en Inglaterra, pero los problemas físicos han hecho que Lamela se haya perdido 133 partidos en las ocho temporadas que lleva jugando en la Premier League.


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El talento jamás se pierde y eso lo saben muy bien en el área deportiva del Sevilla FC. Banega o Nasri son los ejemplos más recientes de futbolistas con una calidad fuera de toda duda que no estaban dando su máximo rendimiento hasta que se enfundaron la camiseta sevillista. ¿Quién dice que Erik Lamela no puede ser el siguiente?

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Precisamente las lesiones y, por la tanto, la escasa regularidad de Lamela en el Tottenham lo han hecho ser suplente en gran parte de su estancia en Londres. En las últimas tres temporadas ha acumulado 4.627 minutos vistiendo la elástica de los Spurs en los que ha anotado 14 goles y repartido 9 asistencias. Sus guarismos, para ser un jugador de rotación, no han sido nada malos.

En esta comparativa realizada por Alebia Analytics de las últimas tres temporadas del argentino podemos ver como en la 18/19 tuvo altas puntuaciones en ataque. Los seis goles que anotó en dicha temporada le otorgaron una gran puntuación en goles, llegadas al área y pases. El juego de Lamela también tiene mucho que ver en este apartado, porque es ese extremo que cuando el juego no está en su zona de influencia suele posicionarse junto al delantero, haciendo en muchas ocasiones una doble punta. El 4-3-3 y el 4-2-3-1 que se viene usando en los últimos años en el Tottenham invitaba a Lamela a hacer ese movimiento para sumar peligrosidad y sorpresa al ataque londinense.

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Centrándonos en este temporada que finalizó hace ya varias semanas, Alebia compara a Odegaard y a Phil Foden con el reciente fichaje sevillista, futbolistas de corte similar en función al algoritmo. Como podemos comprobar, Lamela es un futbolista al que le gusta conducir, regatear, filtrar e incorporarse al ataque. Promedia unas cinco acciones ofensivas por encuentro, con cuatro conducciones y con un porcentaje de regate cercano al 60 por ciento. Tampoco escatima en buscar portería y en aprovechar los espacios de la defensa rival para filtrar pases, con una media de algo más de dos disparos por partido y en torno a dos pases en profundidad por encuentro. Lo que sorprende para los que hemos visto bastante poco de la Premier esta temporada es que en muchos aspectos supera a estos dos futbolistas con los que se compara, pero es cierto que acumulan muchos más minutos que Lamela en sus respectivos equipos.

Aunque no se sabe a ciencia cierta cuál será el rendimiento del argentino en Sevilla, lo verdaderamente importante es que Lopetegui obtiene con Lamela un perfil distinto al de Suso, mucho más creador y organizador que el de Carapachay. Con más presencia en el área contraria, sobre todo, le dará más variantes al de Asteasu a la hora de confeccionar los onces y tener diferentes alternativas a la hora de resolver las complicaciones que puedan surgir durante los encuentros.

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