Todofutbol.cl
·11 de febrero de 2024
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El José Amalfitani vibró como tantas veces en medio de un diluvio infernal. Cuando el partido se iba y el empate dejaba ese sabor a bronca e injusticia, el desahogo llegó con los goles de Aquino y Pizzini, quienes le pusieron el broche perfecto a una victoria muy necesitada.
Antes de disfrutar hubo que padecer la impericia en la definición, la falta de suerte también y por supuesto el golpe que generó el empate parcial de Gimnasia. Así todo, de arranque, Vélez salió a dejar en claro que fue el único equipo que buscó el triunfo.
Tuvo el estreno como titular de Rodrigo Piñeiro, quien mostró dotes de su velocidad y atravimiento. Claudio Aquino manejó los hilos y de sus pies surgieron tres asistencias perfectas para dejar mano a mano dos veces a Brian Romero y en la siguiente al delantero uruguayo, pero en todas ganó el duelo el arquero tripero Nelson Insfrán.
En medio de esas chances llegó la apertura del marcador a los 39´. Tiro libre de Aquino desde el costado derecho y aparición goleadora de Valentín Gómez para gritar de cabeza su tercer gol en Primera. Ganando merecidamente 1-0, el El Fortín se fue al descanso, mientras Gimnasia nunca se animó a salir de su propio terreno.
Ya en el complemento y de arranque, el Lobo cambió la cara y llegó al empate a los 7´. Córner desde la derecha para que Yonathan Cabral cabeceara a la red tras una errática salida de Tomás Marchiori hasta la puerta del área chica. Rápidamente, Vélez volvió a pararse en terreno rival, y si bien por momentos equivocó los caminos, también contó con varias chances claras para ponerse en ventaja…pero la pelota no entraba.
Hasta que a los 96 minutos llegó el primer grito de liberación. Leandro Rey Hilfer cobró un claro penal por mano de Gustavo Canto que generó la segunda tarjeta amarilla para el lateral del Gimnasia. Claudio Aquino tomó la pelota que realmente estaba prendia fuego, aunque le tiró encima toda su tranquilidad/calidad para el 2-1. Y dos minutos después, se desató el éxtasis total con esa corrida profunda de Francisco Pizzini y su primer grito con la V en el pecho.
Despues de un domingo muy triste en el Monumental y tras el flojo arranque en la Copa de la Liga, llegaron los primeros tres puntos de la mano de una clara superioridad sobre el rival. Bajo un tendal de agua y sufriendo, y en la última pelota de la noche, Gustavo Quinteros GRITÓ VICTORIA.
/Sitio Oficial de Vélez Sarsfield