"Pensé que con River iba a viajar y lo más lejos que fui en tres años fue a Chaco" | OneFootball

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·19 de septiembre de 2019

"Pensé que con River iba a viajar y lo más lejos que fui en tres años fue a Chaco"

Imagen del artículo:"Pensé que con River iba a viajar y lo más lejos que fui en tres años fue a Chaco"

A más de ocho años del peor momento de la historia de River, Carlos Arano, hoy ya retirado de la actividad profesional, realizó varias confesiones acerca de la temporada que terminó con el descenso del equipo de Núñez a la segunda división del fútbol argentino.

Chiche, actual entrenador de la Quinta División de las juveniles de Racing, aseguró que lo ocurrido en el Millonario aún "duele muchísimo" ya que él había llegado al club con otros objetivos. "Siempre pensé que jugar en River o Boca iba a ser pelear títulos y viajar a todos lados. En tres años, lo más lejos que fui con River fue a Chaco", señaló, en declaraciones a la radio Club 947.


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"¿Si estuve a punto de agarrarme a piñas con Passarella? Sí, es verdad", reveló el exdefensor que también supo defender las camisetas de Huracán, Quilmes y Estudiantes de La Plata, entre otras, y agregó:  "Fue un momento de mucho nerviosismo para ambos. Antes de la revancha con Belgrano estuvimos encerrados en el Hindú Club con la incertidumbre de tener que ganar y el pensamiento negativo de que podíamos descender. Viví dos días de mucha tensión porque J.J. López no me ponía y yo consideraba que tenía que estar. Por mi forma de ser y personalidad. Me podía hacer el boludo, pero quería estar".

Tras el primer entrenamiento de fútbol, Arano se dio cuenta que no iba a ser titular y no pudo contenerse: "Lo re contra puteé a JJ y me fui. A la tarde hablamos y tratamos de calmarnos, por respeto. A la siguiente práctica, lo mismo: me calenté y empecé a revolear patadas que no correspondían. Ahí me vino a hablar Passarella. Nos dijimos de todo como para cagarnos bien a trompadas pero ningunó amagó. Estuvimos cinco minutos cara a cara, solos los dos. No pasó a mayores, después nos separamos. A las 12 de la noche del sábado -previo a la Promoción- JJ me avisó que iba a jugar. Lo convencí, no sé. También incidía la personalidad y el conocimiento de Daniel. Yo no quería ir al banco, yo quería jugar el partido y me daba igual cómo nos fuera. Asumía los riesgos y lo volvería a hacer".

Por último, el exlateral zurdo contó cómo se solucionó aquel conflicto. "Yo había terminado mi contrato y me llamó Matías Almeyda para seguir. Fui al estadio a los 15 días y vi a Daniel entrando al vestuario. Le pedí disculpas, le dije que yo no era así, que le había faltado el respeto y estaba arrepentido. Me respondió 'quedate tranquilo, pibe, a los chicos como vos los quiero siempre de mi lado'. Es una fiera, siempre decía las cosas en la cara", concluyó.