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·4 de febrero de 2021
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Kays Ruiz-Atil se formó en la cantera del FC Barcelona y un día decidió huir al PSG en busca del dinero que no le ofrecía el FC Barcelona. Ahora está muy arrepentido.
Este excanterano del Barça llegó a jugar en el primer equipo del PSG a comienzos de temporada de la mano de Thomas Tuchel (181 minutos), pero Pochettino ya le ha dicho que en la constelación de estrellas del PSG no hay sitio para él (no juega desde el 5 de diciembre) y que deberá hacer las maletas para buscarse la vida en otro sitio. Algo parecido a lo que ha sucedido con otros canteranos como Diaby, Nkunku, Kouassi y Aouchiche.
Atil observa desde la distancia el peso que están teniendo en el primer equipo del Barça jugadores como Ansu Fati, Pedri, Mingueza o Araujo y se tira de los pelos por no haber tenido paciencia para seguir en el Barça.
El PSG apuesta por la cantera de manera testimonial, para cumplir con la normativa del fair play financiero que obliga a los clubes a promover el fútbol base. Pero el PSG no parece muy empeñado en construir un gran equipo sino en convertirse en un álbum de cromos en el que pueda reunir al máximo de estrellas a golpe de talonario.
Ahora andan metidos en la tarea de renovar a Mbappé y Neymar y fichar a Leo Messi y Sergio Ramos.
Los números no cuadran, porque los ingresos del PSG no dan para pagarlo todo, y más con el desmadre que existe en Francia con los impagos de las operadoras televisivas, pero el dinero llega de Qatar y no de su actividad ordinaria mientras la UEFA y la FIFA hacen la vista gorda con esta competencia desleal que basa su gestión en el chorro de millones que llegan de Qatar a manos llenas.