Agricultura
·9 de septiembre de 2023
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·9 de septiembre de 2023
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Selección de Eslovenia
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El fútbol femenino nuevamente está en la mira luego de la denuncia de una jugadora de la Selección de Eslovenia sobre abusos al interior del combinado nacional, sobre todo por parte de sus entrenadores.
Se trata de Dominika Conc, futbolista del Levante Las Palmas de España, firmó en julio pasado, junto a otras compañeras, una carta al presidente de la Federación Eslovena de Fútbol (NZS) exigiendo la destitución del entrenador Borut Jarc.
En la misiva detallaban que Jarc las había intimidado, además de incurrir en actitudes sexistas y comportamiento inapropiado dentro del equipo durante las concentraciones.
Tras aquella carta, Dominika Conc concedió una entrevista a la BBC Sport, donde contó que «el ambiente era muy poco profesional, muy inapropiado todo. Insultos hacia nosotras, comentarios sexistas y trato homofóbico sobre nuestra vida personal y que no tiene nada que ver con el fútbol. Las cosas estuvieron sucediendo durante los últimos cinco años. Antes teníamos una relación de respeto y por miedo no decíamos nada. Muchos jugadoras tuvieron que pedir ayuda externa, a psicólogos y otros profesionales».
Asimismo la jugadora denuncia que los entrenadores traficaban con alcohol durante las concentraciones y bebían abiertamente durante las comidas y después de las sesiones de entrenamiento, y que las vidas personales y la orientación sexual de las jugadoras se convirtió en un objetivo del staff.
También se alega que las jugadoras se vieron obligadas a jugar un partido de clasificación para la Eurocopa 2022 mientras estaban enfermos con Covid-19. Así como también que sufrieron un «trato degradante» en cuanto al peso corporal y tuvieron que pelear lo indecible para poder usar la misma equipación que los internacionales y poder lucir su nombre en la espalda.
«No había ningún interés por el equipo femenino. No querían escucharnos y decían que no era asunto nuestro. Fue en ese momento que vimos que nadie nos escuchaba. Así que tuvimos que hacer algo diferente y decidimos escribir las cosas y enviarlas a la federación nuevamente y tratar de comunicarnos sobre esas cosas con ellos nuevamente en privado, y lo que hicieron fue que nunca nos respondieron», cuenta Conc
Finalmente, todo esto concluyó con la dimisión de Jarc, quien, además, emitió un extenso comunicado en el que desmentía las acusaciones. Pero Conc cree que la marcha de Jarc no va a solucionar nada.
«Él no era el único que abusaba. Tenemos la sensación de que la federación nos tiene porque tiene que tenernos. Tenemos que luchar por las camisetas, por los nombres de las camisetas… Jugamos en mitad del día, en medio de la nada. No es de extrañar que nadie venga a ver nuestros partidos», lamenta.