Manchester City 1-2 Chelsea: El Chelsea retrasa la celebración del City | OneFootball

Hoy se jugó en el Etihad Stadium el partido entre Manchester City y Chelsea, correspondiente a la 35° jornada de la Premier League.

El Manchester City y el Chelsea chocan en un duelo con sabor a final de Champions anticipada. Los dos equipos se encontrarán en Estambul el 29 de mayo por la final del torneo de mayor prestigio en Europa. Manchester City sabía que no era un partido para relajarse; si ganaba, era campeón de Premier. Chelsea debía ir a por todo, el Leicester había caído derrotado ayer y era su oportunidad para ponerse tercero. El encuentro prometía una batalla épica, pero, guardando sus mejores armas para la final de Champions. Tuchel revolucionó el juego del Chelsea y cada partido busca legitimarlo. Guardiola busca consagrarse como el mejor equipo de Europa y cada partido, es un examen.

El encuentro fue una batalla total de emociones por ambas partes, ambos equipos vieron momentos de brillantez para cada uno y supieron aprovechar sus oportunidades. El Manchester City tuvo una espectacular primera parte; el Chelsea lo tuvo en la segunda mitad. El descanso fue un total parteaguas para ambos quienes anticiparon lo que será la final de la Champions League. Los de Manchester deberán de esperar para celebrar el título y la Premier League aún está en contienda. El Manchester United hará todo lo posible por hacerle la vida difícil a su vecino y que no celebre el título.

Primer tiempo

El encuentro arrancó con un frenesí cómo si de ya se tratase de la final en Estambul. Los dos conjuntos salieron con titulares mixtos entre titulares y suplentes dando oportunidad a refrescar a la plantilla. Los locales presionaban alto haciendo que la visita no lograra salir cómodo de su propio campo; mientras que el Chelsea mantenía la posesión del balón. El encuentro se acentuó con los citizens manteniendo la posesión del balón y cada vez se acercaba más al arco de Mendy; los blues aún no se lograban acomodar en el encuentro y por momentos, se ahogaba. Chelsea y Manchester City no querían arriesgar, jugaban a la segura y con cautela, ambas escuadras querían refrescar los aires y gestionar el partido inteligentemente.

Los dos equipos no lograban salir de su campo en un mediocampo que se poblaba con una batalla entre Rodri y Kanté, el dominio era de cada uno por momentos. El Chelsea priorizaba el traslado de balón cuando este les pertenecía, el City presionaba en 3/4 de cancha. Los sky blues  eran los más peligrosos cuando se acercaban, en los corners buscaban siempre a los hombres altos para ganar de cabeza. Los de azul no generaban las contras tan letales que los caracterizan, la línea de tres del Manchester, era un muro atrás. El dominio del balón era monopolizado por los de celeste, sin embargo, nadie incomodaba en serio al rival.

Chelsea sin balón, City se pone en ventaja

La primera parte llegaba a un punto donde los planteamientos tácticos permeaba más que las emociones futbolísticas. Guardiola planteaba un encuentro cuidadoso y sin arriesgar; Tuchel no encontraba por donde salir de su campo y se veía refugiado en su área. Mendy era el portero que más había participado en el encuentro, mientras que Ederson era un espectador más del juego. El Manchester trataba de ser más incesante por las bandas pero, no progresaban por ninguno de los dos flancos celestes. El Chelsea tenía por momentos destellos de grandeza cuando buscaban a Werner, pero no generaban peligro significativo.

El Manchester se mantenía firmes en la parte bajo gracias a Laporte, Dias y Aké quienes el día de hoy formaban una línea de tres muy bien trabajada. El Chelsea veía sus mejores hombres en Kanté y Werner quienes fueron los más participativos. Los últimos minutos del encuentro fueron donde el Chelsea más se animó, un remate de Ziyech y Rüdiger fueron de lo más peligroso de la visita. Los méritos del local dieron frutos cuando Sterling marcó el primero del encuentro luego de una pifia de Christensen en un balón largo. Sterling aprovechó el error de la defensa y abrió el marcador en lo último del encuentro. Agüero tuvo la oportunidad de poner el marcador 2-0 por medio de un penal en el final, pero, el argentino lo erró horriblemente. Los de Guardiola, se estaban coronando campeones de la Premier League en su casa gracias a la victoria parcial.

Segundo tiempo

La segunda mitad inició con una tónica diferente al primero, el Chelsea ahora era quien dominaba el encuentro y frecuentaba el campo de los de celeste. Los citizens no desesperaban y daban la iniciativa para atacar, ya que, sabían que todo estaba a su favor. El Manchester quería bajar las revoluciones del partido cuando tenía el balón y parar el ímpetu de los blues. La visita se animaba pero se topaba de frente con un Rodri que estaba teniendo un partido impecable, el mediocentro de Manchester era el cerrojo y dolo de cabeza del rival. El Chelsea cada vez llegaba ante la última línea pero aún no lograban incomodar al arco y cada tiro, iba afuera haciendo que el Manchester City se pudiera rearmar.

Los de azul tuvieron su recompensa y tanta agua al cántaro, que se rompió; Ziyech anotó el empate luego de una sublime jugada de Azpilicueta. El gol de Ziyech fue fruto del gran segundo tiempo realizado por parte de los de Tuchel. El gol fue un total antes y después para ambas escuadras, los de Guardiola habían perdido el control del encuentro y los de Tuchel estaban en su mejor momento futbolístico y anímico. Los tiros de esquina era el recurso por donde el City buscaba hacer daños, aunque, la defensa azul se mostraba solida en al aire.

Chelsea despierta; Manchester se duerme

El encuentro seguía vibrante y ahora, el necesitado era el de celeste quienes veían correr el reloj y que el empate los hacia retrasar su eventual victoria por Premier. Los de Londres se mostraban cada vez más peligrosos y un City desconocido no controlaba cuando el rival se acercaba al arco. Los de Pep recurrían a los balones largos cuando no había opciones de pase. El Chelsea era más equipo y le anularon dos goles (de Werner y Hudson-Odoi) el peligro era más que latente. El local sabía que el empate parcial dependía de lo que haga su vecino de rojo contra el Aston Villa para saber si sería campeón. Los de Tuchel estaban sacando un punto de oro en su lucha por clasificar a Champions.

El partido llegaba a sus últimos minutos y no era nada para nadie en el Etihad. Los locales finalizaban el encuentro con un empate con sabor a derrota, la visita tenía un empate con sabor a victoria con un punto valioso para sus aspiraciones. El Manchester City no logró jerarquizar en ningún momento en la segunda parte y parecía un equipo totalmente diferente al de la primera parte. En los últimos minutos, los de Tuchel consiguieron el segundo gol por medio de Marcos Alonso, el gol fue el clavo en el ataúd de los de Pep. El Etihad se quedó atónito ante tal remontada. El Chelsea fue todo lo contrario, un equipo muy pasivo y endeble en la primera parte, mientras que en la segunda mitad fue un conjunto contundente y dispuesto a herir al rival. El City deberá esperar al partido del Manchester United para saber si celebra el título.