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·28 de mayo de 2019
Los motivos por los que Roberto Martínez ya rechazó al Real Madrid y complican al Barcelona

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·28 de mayo de 2019
Roberto Martínez está en boca de todos tras ser vinculado con la posibilidad de sustituir a Ernesto Valverde en el Barcelona. Sin embargo, la vinculación del catalán con la Selección de Bélgica puede ser un impedimento para que se cierre su llegada como ya ocurrió cuando el Real Madrid se interesó en él.
El caso del técnico español es cierto que era uno de los entrenadores que más gustaron al Real Madrid para sustituir en octubre a Lopetegui y ahora al Barcelona, pero sus propias circunstancias personales ya le hicieron muy difícil dar el salto de la selección de Bélgica al club merengue.
Y es que no sólo tiene ahora mismo un contrato en vigor, ocupando el cargo de seleccionador de los ‘Diablos Rojos’, sino que, según ha podido saber Goal, había dado ya su palabra a la Federación de Bélgica para ser también su director técnico (figura conocida también como director deportivo en España y Latinoamérica). Doble cargo, doble responsabilidad para con la KBVB, y seguramente también doblemente difícil para que un club pueda convencer ahora a Roberto Martínez de que deje su proyecto en Bélgica.
Para el Madrid se repitió por tanto una historia muy similar a la vivida este pasado verano con Mauricio Pochettino, uno de los técnicos que más gustaban en el club blanco. Pero éste renovó con el Tottenham (hasta 2023) justo una semana antes de que el Real Madrid empezase su búsqueda de un relevo tras la sorpresiva despedida de Zidane: el 24 de mayo. El argentino ya había dado su palabra para un proyecto a largo plazo, y ni el Real Madrid ni ningún otro club o entidad pudo entonces romper esa promesa ya, con el correoso Daniel Levy de por medio además. Roberto Martínez no sólo comenzó su periplo como director técnico de Bélgica, si no que también había renovado ya su contrato como seleccionador recientemente. Concretamente, el pasado mes de mayo. Hasta 2020, ni más ni menos. Su fe en la apuesta belga es indiscutible. ¿Podrá el Barcelona cambiar esta perspectiva ahora?
Y se da el caso además de que, según los que le conocen, Roberto Martínez es de esos profesionales de palabra. De los que piensan que los contratos no están para romperlos sino para cumplirlos. “Cuando un profesional está con contrato es poco lo que se puede hablar de ello. Estoy comprometido con Bélgica", decía el español el pasado septiembre durante la Gala FIFA The Best, cuando fue preguntado por las opciones que había de que entrenase a Colombia. "No he tenido contacto con nadie de Colombia. Tengo dos años de contrato con la selección belga y estamos trabajando para el europeo”, zanjó el técnico ante la insistencia por su futuro como cafetero.
“Después de mi primer año en el Everton pude irme a otros equipos pero creí que tenía un proyecto a largo plazo [y por eso siguió]”, explicaba también en una entrevista a El País en 2016, poco después de cerrar su etapa en la Premier League. Otra señal de lo arraigada que está en Roberto Martínez la idea de la lealtad y la fidelidad a los proyectos con los que se compromete. Y es cierto que el Real Madrid y Barcelona ya han ‘roto’ matrimonios anteriormente. Y que el club culé puede no ser ni como la Selección Colombiana ni como el Everton, pero su contrato con Bélgica sí que sigue siendo el mismo que hace unos días atrás. E incluso reforzado, por su nuevo puesto como director técnico de los ‘Diablos Rojos’.
Asimismo, se da la circunstancia de que Chris Van Puyvelde –anterior director técnico belga- no es el único profesional que ha abandonado la Federación de Bélgica en los últimos tiempos. Thierry Henry, asistente de Roberto Martínez, inició su carrera en solitario y nada más terminar el Mundial fue su otro asistente, Graeme Jones, quien hizo las maletas para ocupar el banquillo del West Brom. Lo que demanda consigo un ejercicio todavía mayor de responsabilidad y estabilidad de Roberto Martínez para con el exitoso proyecto belga. Lo que seguramente se traduzca en más trabas todavía para que el ahora seleccionador vuelva a Cataluña para sentarse en el banquillo del Camp Nou.