😱Los mayores MILAGROS de una Final de Champions | OneFootball

Ir de favorito no es lo más común cuando se trata de finales de Liga de Campeones y es fácil entender por qué, con la élite de Europa enfrentándose durante toda la temporada hasta que se reducen a solo dos equipos.

Las últimas tres finales terminaron 1-0 y solo una de las últimas 18 finales se ganó por más de dos goles de margen después de los 90 minutos.

Pero este año podría ser diferente. El Manchester City es el gran favorito para ganar su primer título de la Liga de Campeones y completar un triplete histórico si logra derrotar al Inter en Estambul este sábado.

Pero, ¿y si no lo hicieran? Profundizando en la era de la Liga de Campeones (es decir, desde 1993), aquí están las tres mayores sorpresas en las finales de la Champions.

2012: Chelsea vence al Bayern en Múnich

Los Blues llegaron a la final, tuvieron que viajar a Munich. Para enfrentar al Bayern de Múnich y en su estadio. Las probabilidades no podrían haber sido más altas contra el club del oeste de Londres, que perdió dos de sus últimos tres partidos de la Premier League (y, para equilibrar, ganó la Copa FA) antes de la final.

Pero había más. No solo jugaban contra el Bayern en Múnich, sino que tenían que hacerlo sin John Terry, Branislav Ivanović y Ramires, todos sancionados. El trío estuvo entre los seis jugadores del Chelsea con más minutos jugados en la Premier League en la temporada 2011/12.

El Chelsea fue superado en tiros (35 a 9 en 120 minutos), con tiempo extra forzado por un empate de Didier Drogba en el minuto 88 desde el único tiro de esquina de Chelsea en todo el partido. El Bayern tuvo 20.

Sobrevivieron a esos 120 minutos y el partido se nivela desde el punto de penalti y los errores de Ivica Olić y Bastian Schweinsteiger ayudaron al Chelsea a asegurar su primer título de la Liga de Campeones.

2005: La remontada del Liverpool sorprende al Milán

El Liverpool solo había logrado terminar quinto en la Premier League y había perdido 14 partidos de liga en la temporada que viajó a Estambul para medirse al Milan.

Al descanso estaban tres goles abajo.

“Casi comencé a arrepentirme de llegar a la final”, dijo más tarde Jamie Carragher, tal era la vergüenza de defraudar a los fieles del Liverpool que habían viajado a Turquía en gran número.

Sin duda, ese leve sentimiento de arrepentimiento se calmó cuando Liverpool logró quizás la remontada más famosa en la historia del juego más popular del mundo. Y lo hizo nada menos que en el encuentro de clubes más importante del planeta.

El Liverpool logró lo impensable, anotando en los minutos 54, 56 y 61 antes de llevar a Milán hasta los penaltis y vencerlos desde los once metros.

Una actuación, y un shock, que nunca se olvidarán.

1997: El Dortmund desafía las probabilidades contra la Vecchia Signora

Habiendo ganado la Bundesliga en 1995 y 1996, el equipo de Ottmar Hizfeld claramente tenía la calidad para competir en lo más alto.

Sin embargo, en comparación con la Juve, realmente no lo hicieron.

El campeón en ese momento, después de haber vencido al campeón de 1995, el Ajax, en la final de 1996, la Juventus contaba con un verdadero equipo de estrellas.

Zinedine Zidane y Christian Vieiri se habían sumado al equipo que ganó el trofeo en 1996, añadiendo calidad a la ya absurda calidad de Alen Bokšić y Alessandro Del Piero arriba y Didier Deschamps proyectando una defensa que contenía al legendario Ciro Ferrera.

Karl-Heinz Riedle anotó dos veces para los alemanes, que sellaron el partido a través del joven Lars Ricken, con su primer toque tras salir desde el banquillo, para acabar con las esperanzas de remontada de la Juve tras el 2-1 de Del Piero.

No es exactamente David contra Goliat, pero ciertamente un resultado que nadie realmente vio venir.